1. Asignatura pendiente


    Fecha: 08/08/2022, Categorías: Erotismo y Amor Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... me aproximé a ella para que notara como algo crecía deseando fundirse con ella... no pude aguantar más, mis labios empezaron a devorar su cuello apasionadamente.
    
    Alberto.. musitó ella
    
    sshh, tu cierra los ojos y relájate
    
    Su silencio fueron las mejores palabras que en ese momento pude escuchar, la abracé fuerte clavandole mi ya abultada polla en su espalda, oír sus pequeños suspiros mientras la besaba me excitaba cada vez más, cogí sus pechos y un jadeo se le escapó mientras besaba su espalda, la imagen de sus labios entreabiertos me estaba poniendo a mil, por un instante imagine esos labios entreabiertos rodeando mi glande y una palpitación recorrió todo mi polla, le giré la cara y comenzamos a besarnos como sino hubiera un mañana, la sensación de rozar sus labios hizo que mi cuerpo temblara, con suavidad y firmeza la cogí de su larga melena y le obligué a inclinar su cabeza hacía atrás, mis labios se dirigieron a su cuello mientras su respiración se agitaba cada vez más, la miré a los ojos y la besé mordisqueando su labio superior y a continuación el inferior, nuestras lenguas empezaron a trabarse armónicamente, mi mano recorría su muslo hasta quedarse cerca de su ingle, ella inconscientemente movía su cadera buscando el roce de mi mano. La cogí fuerte de la mano y le pedí que me acompañara, rodeamos la vieja casa abandonada a espaldas del camino, para mi sorpresa la puerta de la caseta se encontraba entreabierta, tras una breve inspección visual entramos
    
    ¡Estas ...
    ... loco!
    
    ¡Tu me vuelves loco!
    
    Dije mientras la cogía fuerte del culo y la empotraba entre la pared y yo... cuantas veces había deseado tener ese culo entre mis manos, perfectamente redondo como culminación perfecta a sus larguísimas piernas. Cogí sus manos y se las puse entre su espalda y la pared, estar a mi merced la excitaba en sobremedida, sin dejar de besarnos comencé a desabrocharle su pantalón corto, que cayó rápidamente al suelo , por encima de sus braguitas comencé a acariciarla, sus caderas se contoneaban deseosas de mis caricias, con un rápido movimiento deslice su ropa interior de encaje que hizo que mi corazón se acelerara rápidamente, acaricié sus labios y me perdí en su clítoris, nuestros besos solo eran pausados por los jadeos que ya no se esforzaba por controlar. Liberé sus manos para quitarle la camisa y desnudarnos, cogí su mano y la puse sobre mi polla que a esas alturas permanecía erguida en todo su esplendor. Ella deslizó su mano de la punta hasta la base lentamente, rodeándola como tratando de imaginar que le esperaba...Mi polla era larga, unos 18 cm, bastante gruesa, lo suficiente como para dar placer a cualquier mujer, ella empezó a agitarlo fuertemente extasiada en una gran excitación, no quise perder el control de la situación, había esperado tanto tiempo este momento que quería tener todo bajo control, la suspendí en el aire y la transporte hasta una mesa vacía donde la recosté, comencé a besarla por las costillas subiendo lentamente hasta sus ...