1. Asignatura pendiente


    Fecha: 08/08/2022, Categorías: Erotismo y Amor Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... pechos, con la otra mano acariciaba su clítoris, sus labios estaban húmedos completamente, subí por su pecho hasta alcanzar sus pezones, jugueteé alrededor de ellos, cuando finalmente los alcancé con mi lengua, los gemidos de Alexandra eran incontrolables, me perdí un buen rato gozando entre sus pechos, besándolos suavemente, rodeando con mi lengua sus pezones, dándoles pequeños mordiscos embriagado en un éxtasis fuera de todo control posible. Finalmente ya no pude aguantar más cogí la punta de mi engrosado pene y la deslice por sus labios inferiores, acariciando con ella su clítoris.
    
    ¿Quieres que te la meta?
    
    Siiii, suplicó
    
    ¡Pues tendrás que esperar!
    
    Dije mientras me arrodillaba entre sus piernas y empezaba a besar sus suaves muslo, recorriendo cada cm de su cuerpo hasta llegar a lo más intimo de su anatomía, donde con los dedos separé sus labios para recorrerlos con mi lengua, hasta llegar a su clítoris y juguetear con él, haciendo pequeños círculos..introduje dos dedos en su vagina y un gemido salió de su garganta. Su cuerpo se estremeció en un profundo orgasmo que yo no esperaba tan pronto. Mi hasta entonces pasiva amiga se levantó como un resorte y me besó contra la pared. Cogió mi pene y empezó a agitarlo vivamente mientras besaba mi pecho, finalmente se agachó y arrodillada junto a mi introdujo mi rasurado pene en su boca mientras me miraba con esos ojos claros que me volvían loco, no pude hacer más que morderme los labios y disfrutar de esa escena que se ...
    ... me antojaba un sueño, su lengua se ensañó con mi glande, mordisqueó todo el tronco de mi polla hasta llegar a mis huevos, al sentir como los succionaba creí estar en el cielo. Ahora era ella la que me estaba haciendo sufrir, me estaba haciendo una mamada increíble, sentí varias veces que no iba a poder aguantar por lo que decidí que había llegado el momento, la incorporé y cogí mi polla hasta penetrarla totalmente, sentir su calor y los flujos que liberaba fue muy placentero, ella jadeó, yo también, la cogí fuerte del culo y la empotré contra la pared y empecé a embestirla fuertemente, nuestros cuerpos sudaban y nuestros labios se besaban apasionada y arritmicamente pues mis embestidas a penas permitían mantener el equilibrio. La baje al suelo y le dí la vuelta, su largo pelo en su espalda y ese precioso culo me pusieron más si cabe, la cogí de sus pechos y se la volví a meter, de nuevo comenzamos a jadear, la empalaba con fuerza mientras mis manos amasaban sus pechos totalmente erizados, sentí que el final se acercaba y deslicé mi mano por su ombligo hasta llegar a su clítoris, sin dejar de metersela empecé a masturbarla, su cuerpo se encogió y un espasmo la recorrió de los dedos de los pies a la cabeza, segundos después estallé en un tremendo orgasmo que la llenó por completo de mi leche caliente que había salido en cantidad considerable, se giró y nos besamos.
    
    Nunca más volvió a suceder nada, pero esa tarde nos unió más que nunca y cada vez que camino por el parque, un ...