Ella: Noche de copas
Fecha: 19/08/2022,
Categorías:
Hetero
Autor: Hansberville, Fuente: CuentoRelatos
... estimular su ano y su clítoris:
-Me voy a correr cabrón, sigue dándome. Méteme otro dedo en el culo. Aaahhh, aaaahhh.
-Sigue botando que me voy a correr, joder. Como follas tía.
-Aaaahhh, me corroooo –anunciaba la mujer.
-Toma leche, toma.
Ella notó como volvió a descargar todo su semen dentro de su sexo. Cayó exhausta sobre él quién se relajó con la segunda corrida y respiró hondo. Sus cuerpos sudorosos reposaban uno sobre otro. Ella tenía su melena alborotada sobre su cara. Tras poco más de un minuto descansando aún notaba lo enorme que era la polla, aunque había bajado notablemente la erección:
-Eres increíble, tía. Como follas, joder.
-No, tu polla es increíble. Pensé que me la sacabas por la boca. Que polvo más rico.
La periodista un poco dolorida por la falta de práctica de los últimos meses tuvo que esforzarse para pasar a la parte trasera sin salir del coche. Ésta no disponía de asientos, según le comentó Carlos para ganar espacio para sus tablas y sus cometas. Ahora estaban tumbados, desnudos sobre una colchoneta hinchable. Habían abierto las ventanas y disfrutaban de un cigarro:
-Así que éste es tu picadero. ¿Aquí te traes a las clientas del hotel?
-No te creas, no se liga tanto. Antes sí. Cuando trabajaba en los bares de copas, era más joven, más guapo…
-No me digas que la tenías más grande…
-Qué graciosa –dijo el camarero mirándola y arrugando la cara. –Bueno ¿y tú qué? ¿Cómo estás de vacaciones sola?
-Uf, lo ...
... necesitaba. No ha sido un buen año. Y he querido desconectar de todo y dedicarme a disfrutar… de los placeres de la vida. –Apuró el cigarro dando una calada fuerte. –…una buena playa, un buen hotel, una buena “juerga”… una buena polla… un buen polvo. –Esto lo decía casi en susurro y mientras acariciaba el cuerpo de su amante.
Carlos la miró y se giró sobre ella que le acogió entre sus brazos. Se besaron largo mientras la mujer le cogía la cabeza. Él empezó a bajar, besándola, lamiéndola. La mujer estaba en la gloria. El hombre era un auténtico “profesional”, sabía cómo mantener caliente a una tía. No tenía prisa, siempre la mantenía con la tensión justa. Empezó a comerle las tetas y los pezones:
-¿Te gustan mis tetas? ¿Están ricas? –preguntó ella.
-Están riquísimas. Me gustan tus pezones gordos.
-Cómeme el coño. Hace mucho que nadie me lo come.
Carlos comenzó a bajar sin dejar de lamerla y chuparla entera. La periodista tenía un desnudo espectacular. Con delicadeza, le separó las piernas y le metió las manos bajo el culo para levantarla. Tenía el coño precioso, con unos labios gordos y una buena pipa que asomaba por la excitación. La raja la tenía grande, de la que se desprendía un olor a sexo exquisito. Su ano estaba oscuro y arrugado. Se veía que era virgen. Desde aquí comenzó a pasarle la lengua. Ella notaba la punta de la lengua caliente en la entrada de su ano para seguir hasta la vagina. Se la metía dentro y muy despacio subía hasta su clítoris donde notaba un ...