1. Pasándolo bien en una convención


    Fecha: 11/09/2022, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... gemidos, sin embargo, a los pocos segundos ya estaba sorbiendo y permitiendo que Luis le hiciera una follada oral en toda regla.
    
    De repente, Luis comenzó a gritar de placer y mi mujer abrió los ojos de forma exagerada, los tenía como platos. Era evidente que Luis se estaba corriendo y echando lo más grande dentro de la boca de mi mujer, ella miraba hacia arriba, hacia los ojos de Luis, los movimientos en la parte delantera del cuello de mujer dejaban claro que estaba tragándose todo su semen, sin dejar escapar ni una gota, hasta que Luis, extasiado, retiró su miembro de la boca de mi mujer y se tumbó en la cama para descansar – ¡Dios! En mi puta vida he tenido un orgasmo mejor que este –exclamó Luis.
    
    Mi mujer se limpió los labios y me dijo –Vamos cariño, ahora te toca ti.
    
    Creo que nunca había visto sonreír a mi mujer de esa manera, ciertamente estaba disfrutando como nunca lo había hecho con el sexo y con el rol que había adoptado, …, ya lo dice el refrán «a la puta como reina y a la reina como una puta».
    
    – Veo que te lo pasas bien siendo tú la que llevas las riendas, ¿no?. Pues eso se va a acabar ahora. ¡Sujetadla chicos! – les pedí a Jorge a y Luis que me la sujetaran, cada uno por un lado, sujetando su respectivo brazo y pierna, para tenerla completamente abierta, inmóvil a mi merced.
    
    Empecé a follarla, con placer por todo lo que había visto, y con rabia, porque aunque todo había sido consentido y además deseado por mí, uno no puede evitar tener en su ...
    ... interior el coraje de que otros tíos se han follado a tu mujer, en tu cara.
    
    Los embistes que le daba a mi mujer eran fuertes, le escupía en la boca, ella se lo tragaba y me pedía más. Mis penetraciones se iban alternando de su coño a su boca y viceversa, mientras Jorge y Luis la sujetaban con firmeza. A veces, tanto Luis como Jorge, aprovechaban que yo estaba penetrándole su coño y yo mismo sujetaba su piernas para ellos turnarse y meterle sus pollas, que ya estaban de nuevo duras, en su boca y ella lo aceptaba lamiéndolas.
    
    Yo estaba tardando un poco más que mis dos predecesores, pienso que porque durante las dos sesiones previas a la mía tuve algún «micro-orgasmo» viendo cómo se follaban a la que es mi mujer y sobre todo como disfrutaba ella con eso.
    
    En un par de ocasiones, Carmen, siguió con su juego de oposición de resistencia, y apartaba su boca de las pollas de mis dos compañeros de trabajo, cosa que yo atajaba con un leve cachetazo en su mejilla –Eres nuestra zorra, nuestra puta y tienes que comérsela sin protestar, ¿queda claro? –le dije mientras le echaba un poco de saliva dentro de su boca.
    
    –Perdón cariño, no lo volveré a hacer.
    
    –Así me gusta – le dije y ella comenzó a comerle las pollas de nuevo, hasta que yo la sacaba y me la follaba oralmente también. Ellos se partaban gentilmente,para eso era mi turno.
    
    Después de un buen rato yo ya tenía la polla como una barra de acero y con muchas ganas de correrme, me encontraba encima de ella, en la postura del ...
«12...6789»