1. En la piscina de mis cuñados con mi mujer


    Fecha: 15/10/2022, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... estaba poniendo muy cachondo por lo que inconscientemente, levanté la cabeza y cerré los ojos para dejarme llevar por el placer que me estaba proporcionando con su lengua y su boca succionando mi polla, que notaba llena de su saliva. Durante un par de segundos noté que se la sacó de la boca, lo que me hizo volver a abrir los ojos y mirar de nuevo el reflejo. Al momento ella seguía chupando bien profundo mi polla a la vez que con su mano apretaba mis huevos y yo miraba confuso el reflejo sin estar seguro de lo que veía. No podía diferenciarlo bien, pero por la posición de su dedo, pude ver como no estaba penetrando ahora su coñito, sino que debía haberse lamido el dedo cuando había parado de chupármela para lubricarlo bien y meterlo en su culito. Pensé que debía estar viéndolo mal y que en realidad no lo estaría distinguiendo bien, porque nunca le había visto meterse un dedo por ese agujero. Ana era muy reacia a que me la follara por el culo, pero mi teoría es que si que le gustaba, porque en varias ocasiones, la había puesto a cuatro patas y le había lamido el ano y me la había follado con la lengua, todo lo profundo que podía y notaba cómo cada vez se habría más el agujerito y era más fácil de penetrar. Ella siempre que se lo hacía gemía de placer y se tocaba su clítoris al mismo tiempo para correrse, pero cuando acababa, siempre me pedía que no lo hiciera más porque no le gustaba, que se sentía mal cuando le lamía el culo.
    
    La cuestión es que ahí estaba en el borde de ...
    ... la piscina, a cuatro patas, con mi polla en su boca a punto de estallar y su dedo entrando y saliendo de su culo. Paraba de chupármela para gemir y hacerse el dedo más rápido, pero enseguida se la volvía a meter hasta el fondo haciendo ruidos guturales. No quería correrme así, viéndola tan caliente y pudiendo ser esta la ocasión en la que me dejara que me la follara por el culo. La cogí de la barbilla para levantarle la cabeza y sin dejar de mirarme, se dio la vuelta y se puso de espaldas a mí. Había entendido perfectamente lo que quería hacer, pero dudaba si realmente pensaba dejarme que me la follara por el culo o simplemente quería que se lo hiciera por detrás, ya que es su postura favorita. La duda me la solucionó muy rápido, cuando echó saliva en la punta de sus dedos de la mano derecha y se los frotó por su ano, cogiendo acto seguido mi polla y llevando la punta a la entrada de su culo. La tenía durísima de toda aquella escena, por lo que si ella estaba por la labor, no costaría mucho entrar en ella. De hecho, lo estaba, porque sin yo moverme, ella empujó sus caderas hacia atrás y mi polla entró hasta el fondo de su culo como un cuchillo en la mantequilla. La dejé allí unos segundos para que su ano se habituara a mi polla y quise empezar a moverme cuando Ana comenzó a mover en círculos su cadera, follándose ella sola su culito con mi polla. Llevó sus dedos de la mano derecha a su coñito y apoyó su cabeza sobre su brazo izquierdo, sobre el que se apoyaba en el suelo y me ...