Tu novia (perspectiva masculina)
Fecha: 11/11/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Soficas56, Fuente: CuentoRelatos
Conocí a tu novia el primer semestre de la universidad. Con apenas 18 años, era una de las chicas más hermosas y joviales que había conocido. Era sin duda la chica más tierna y dulce de nuestra generación; siempre sonriente, con una voz tan suave, y sus expresiones que dejaban ver su inocencia. Yo, como muchos, me hice su amigo, deseando que ocurriera algo más. Y aunque ella no era para nada tonta, me di cuenta que sería complicado cumplir mis deseos con ella, al menos por un tiempo. Era una estudiante muy aplicada, tranquila, y aunque llegué a verla en una que otra fiesta, no era del tipo de chicas que no regresaba a dormir a su departamento, aun siendo una estudiante foránea.
Ser amigo de tu novia me permitió verla crecer; verla transformarse en una mujer. Por los siguientes dos años, la dulce chica que conocimos, se convertía en una gran mujer, más hermosa que nunca, con una mirada encantadora y sexy. Su sonrisa alumbraba a quien fuera que la viera. Y siempre, sin excepción, era su cuerpo lo siguiente que llamaba la atención de cualquiera. Con 20 años, tenía un cuerpo increíble. Su piel blanca tan suave y femenina, era tan... su complexión delgada la hacía lucir muy atractiva, acompañada de lindas piernas, una cintura de modelo, y un par de senos preciosos. Más de una vez intenté observarla desde atrás de ella, intentando alcanzar a ver sus pezones en su escote, y desafortunadamente mis intentos fueron en vano. Como deseaba tener la más corta oportunidad de verlos... ...
... y más que eso.
Tenía que aceptar que en ese momento tu novia era inalcanzable para mi. Así que me dedique a ser su amigo, genuinamente. Mis deseos sexuales los llené con otras chicas, no tan bellas como tu novia, pero sí más fáciles de atraer y de... bueno... coger. No me quejo, en realidad disfrute mucho del sexo con varias de ellas. Hasta tu novia las conoció, y sabía de mis aventuras con ellas. Tu novia destacaba hasta con su amistad conmigo, llegando a considerarla una de mis mejores amigas, y creo que ella a mi también. Lo que sin duda me causaba curiosidad, era su vida sexual. Me costaba entender como una mujer así no se llevaba a un chico diferente cada viernes por la noche. Yo mismo la llevé a su departamento después de las fiestas, sin nadie que la acompañara. ¿Sería que ella tenía sus ligues fuera de esos ambientes? ¿Cómo una chica así controlaba su deseo sexual? Era claro que por su cuerpo, estaba en plena condición reproductiva... si hablamos en términos biológicos.
Luego... llegaste tú. Un chico fuera de su círculo social, de otra universidad, que en cuestión de semanas, se había ganado el corazón de una de las mujeres más hermosas que conocí. Me alegré por ella, si te soy sincero. Pero no podía dejar de pensar en como me molestaba la idea de que pronto, en algunas semanas más, estarías haciéndole el amor a esa mujer en particular. Una persona llega de la nada y se coge a la más buena de la carrera. Admito que pasé algunas noches masturbándome imaginándola ...