Turno de noche
Fecha: 16/11/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Gargola, Fuente: CuentoRelatos
... bata y se aferraban a mis pechos. Poco a poco sentí la necesidad de acelerar el ritmo saltando encima de él como una amazona y gimiendo irremediablemente.
Aunque era difícil que alguien entrase, puesto que cada una teníamos la asignación de nuestras tareas, no quería que mis gemidos me delataran, pues la quietud en esos momentos en los pasillos era total y mis frenéticos gemidos originados por el fulgor de los embates en mi sexo, eran un peligro que perturbaba la paz del lugar, de modo que tuve que contenerme para no gritar de placer cuando un poderoso orgasmo golpeó mis entrañas y se apoderó de todas las terminaciones nerviosas de mi cuerpo, y unos segundos después noté las convulsiones de su verga eyaculando dentro de mí.
Me quedé encima de él exhausta con su miembro todavía en mi interior, y poco a poco fue perdiendo rigidez hasta que se salió, lo que provocó un sonoro pedo, y con él, su esencia mezclada con mis flujos escaparon del orificio. Después de la euforia vino la calma y reconsideré mi conducta, pensando en que me había convertido en una depravada, pero la dicha de la que mi cuerpo se benefició alejó momentáneamente los pensamientos adversos. ...
... Cuando me recompuse me vestí con premura y me despedí de él y fui a lavarme para después volver a mis obligaciones.
Mientras finalizaba mi jornada me replanteé de nuevo el hecho de pasarnos los números de teléfono porque ahora estaba segura de que yo también le gustaba a él y la atracción era mutua, sin embargo una vocecita en mi interior me advirtió que era el momento de poner fin, pues era sabido que cuando no se sabe parar a tiempo en estos casos, pronto surgen las consecuencias, o lo que es lo mismo, quien juega con fuego, pronto acabará quemándose, y yo tengo una familia de la que estoy orgullosa y no quiero destruir.
Para mí fue una aventura increíble, la mayor locura que hecho hasta el momento y no sé si volvería a repetirlo. Supongo que si me surgiera la oportunidad, no la rechazaría. Lo que tengo claro es que yo no la buscaré.
Después de la experiencia, mi vida sexual mejoró, pero poco a poco las aguas turbulentas volvieron a la calma. No sé si aquella vivencia repercutió de algún modo en mi vida conyugal, en cualquier caso, ahora disfruto más que antes y mi mente es más abierta con respecto al sexo, aunque pensándolo bien… no sólo mi mente…