1. Del paro a la esclavitud


    Fecha: 05/01/2023, Categorías: Lesbianas Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... fábrica, nos reunimos con Claudia para tratar flecos de los contratos, pactar suministros, las horas pasaron lentamente hasta que por fin se cerró el acuerdo. Al final, con los clientes ya levantándose, Andrés le dijo a Claudia:
    
    -Bueno Claudia, perfecto, y ahora por lo menos tendremos que cenar juntos y sellar esto por lo menos con un brindis, no?
    
    -Joder, como sois los clientes por comer gratis…venga vale…reservo y os aviso sobre las 9 para cenar vale?
    
    Al irse, Claudia me llamó:
    
    -Loli, tienes algo que hacer esta noche?
    
    -Pues no…nada especial…
    
    -Vale, pues te vienes a cenar conmigo y esos pesados, vete llamando a, no sé, a algún sitio que te apetezca que sea bueno y tenga pinta de caro para quedar bien…
    
    -Pero a cual? No sé..
    
    -No sé a cualquiera de los que tengamos por ahí, elige tú carne o marisco…a mi me da igual…pero con camareros de pajarita, a estos paletos esas cosas les impreisonan.
    
    -Por cierto, tienes alguna ropa digamos, elegante,
    
    -No estoy bien normalmente?
    
    -Si mujer, pero bueno, creo que has ayudado mucho en eta operación, sobre todo tus atributos físicos…jaja…y bueno…mira, tengo una tarjeta de compra de unos grandes almacenes creo que debe haber unos 500 €, comprate algo bonito, te lo mereces. Venga muévete, reserva para las nueve, dime donde y nos vemos allí vale?
    
    Ahí salí yo, con mi vale de compra, lo primero que pensé fue en quedarme los 500 € y ponerme algo de casa…pero bueno que narices, una también tiene que estar guapa, y ...
    ... 500 € no se ganan todos lo días. Paseé por el centro comercial, busqé en las boutiques y finalmente me enamoré de un precioso vestido morado, era insinuante pero no escandaloso, las mangas eran de gasa, y tenía un bonito escote que llegaba hasta donde debe llegar un escote…solo dejaba un agujerito para que entrara el ojo. Tenía un corte en el lateral que llegaba hasta el muslo,ajustado marcando mi culito…me quedaba como un guante, ni retoques habia que hacerle.
    
    En casa me acicalé, un baño refrescante y aromático, una tanguita de encaje, un sujetador con un pequeño relleno, no es que lo necesite, pero cuanto mas levantadas mejor…
    
    En el taxi, noté vcomo el taxista perdia su mirada en el espejo…coqueta y malvada me acerqué al centro del asiento insinuando mis piernas…cosa que pronto dejé de hacer ante el miedo a que algún autobús nos llevara por delante por la fijación del taxista.
    
    El breve camino entre el taxi y el l,ocal me sirvió para notar que era el centro de atención en la calle, notaba los ojos posados en mí, el elegante portero del restaurante recorrió mi cuerpo desde arriba hasta abajo y otra vez hasta arriba…
    
    Al no haber llegado nadie, me senté en la barra esperando, y recibiendo las miradas deseosas de los hombres y de odio de las mujeres, me sentía sublime, en la gloria.
    
    Claudia llegó al poco, bueno lo de la elegancia ya he comentado que no iba con ella, unos pantalones arrugados y una chaqueta demasiado pequeña para su cuerpo, poco habia podido hacer ...
«12...567...12»