1. Mi esposa, de guía turística


    Fecha: 13/01/2023, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: femerba, Fuente: CuentoRelatos

    Habíamos quedado de hacer algo diferente el fin de semana y se nos ocurrió reservar habitación en un hotel reconocido de la ciudad, en un plan que promocionan para parejas. El plan incluye tres días y dos noches, alojamiento en una suite, cena de gala, acceso a la discoteca y facilidades del hotel, spa, gimnasio y las zonas húmedas.
    
    El plan iba de viernes a domingo, así que llegamos temprano en la tarde del viernes y nos alojamos. La cena de gala estaba programada para el día siguiente, así que nos dedicamos a conocer el lugar y salimos a caminar por los alrededores, visitando el comercio disponible por el sector. Cuando llegamos al hotel, más o menos a las 7:30 pm, me entró una llamada de la empresa para la cual trabajo. Como piloto que soy, fui programado para realizar un vuelo al día siguiente. Tal situación era una contrariedad, pero no había posibilidad de evadir la obligación.
    
    A mi esposa le disgustó tremendamente que no informara acerca de las circunstancias que teníamos y que la empresa se buscara a otra persona, algo que yo sabía no iba a ser posible porque, si me habían llamado, era que ya habían agotado opciones. Y así había sido. La tripulación disponible iba a realizar otro vuelo y, no habiendo sino otra tripulación de la cual echar mano, se nos había llamado para colaborar. En fin. En las empresas pequeñas esto es común, así que la opción era adaptarse a la situación.
    
    Después de aquella noticia, todo lo planeado se vino abajo. Conversamos sobre el ...
    ... asunto y decidimos mantener el plan, pues podía regresar temprano al otro día y aprovechar la noche del día siguiente. Por lo pronto, y sin posibilidad de irme de fiesta, sólo podía prometer que la iba a acompañar esa noche y regresar lo más temprano que pudiera al día siguiente. A ella no le gustó para nada el plan y prefería regresar a casa, pero yo le manifesté que ya habíamos pagado y que lo mejor era tratar de sacarle provecho a la situación.
    
    Fuimos a cenar al restaurante del hotel y allí, vimos que había varios caballeros, supuestamente extranjeros, aparentemente solos, esperando ser atendidos. No le pusimos mucha atención a aquello, pero nos causó curiosidad que había muy pocas parejas en el lugar. Eso, no obstante, no fue impedimento y nos disfrutamos de la comida que allí ofrecían. Sin embargo, el tema obligado de conversación de mi esposa era ¿qué voy a hacer sola el día de mañana? Le dije, bueno, ahora averiguamos en la recepción, pues de pronto hay algún tipo de evento programado y vemos qué se puede hacer.
    
    Efectivamente, pasada la cena, pasamos por la recepción para averiguar qué eventos habría disponibles. Se nos informó que la discoteca estaba disponible ese día y que, al día siguiente, había un tour programado para visitar atracciones turísticas en los alrededores de la ciudad. Bueno… ¿Hay cupo disponible? Si señor. ¡Listo! Registramos a mi esposa en la lista de participantes y pudimos ver que había varias personas incluidas. El tour estaba programado para ...
«1234...»