1. Sexo embarazoso, gimnasia de la alegría


    Fecha: 16/01/2023, Categorías: Infidelidad Autor: Lobo Feroz, Fuente: CuentoRelatos

    ... más y más fuerza, la constante en los incontables orgasmos que la conmueven.
    
    —Siii!, quiero más, dame más, me gusta!, mátame. Entra más fuerte. Cógeme, rompe la concha de tu puta, dame pija, ábreme más con esta poronga de burro. Cógeme, cógeme!!...
    
    Seguía dándole verga, no necesitaba moverme mucho, ella se debatía en su propio goce, eso era lo que necesitaba para retardar mi acabada. Aprovechaba su deliciosa calentura para disfrutar demorando el momento, retomé el ritmo del garche, apretando sus piernas entre mis rodillas, entrando con vehemencia y furiosas embestidas, en silencio, concentrado en darle toda la pija que necesitaba.
    
    La velocidad y la concentración me están llevando al borde mismo del abismo. El agite continuado, despertaron el letargo de la serie de orgasmos, los embates profundos dejan la huella del poder del macho sobre la hembra, tomada con fuerza de los cabellos impongo la fuerza dominante sobre la sumisa entrega. El gemido jadea en sus entrañas, fuera de control, un bramido grueso y áspero brota desde lo profundo, jadeo como un padrillo sirviendo a su yegua. Me derramé dentro de su vagina.
    
    —Wowww, que caliente papi, que caliente, siento tu leche!, te siento papi...
    
    —Ahhh, ahí va el resto, toma!…
    
    —Sí, papi, dale toda la lechita tu puta, dámela toda, nunca me sentí venirme con tanto entusiasmo, tan… ya ni sé cuántos. Siento tu leche alimentando mi deseo, ahora necesitaré más leche. Me vas a dar más? Quiero más… (Mohines haciendo ...
    ... “pucherito”)
    
    Agarrado de sus caderas, la intensidad del polvo era algo inédito. Me retiré del estuche caliente, sentado en la cama la observo, disfruta el éxtasis, permanece de bruces, el rostro desencajado pero feliz, volteó para recoger en la mano el semen que rebasa de su vagina, la mano a modo de cuchara, lo mira, sonríe mientras lo esparce sobre las tetas, frota los pezones con el espeso fluido.
    
    —Esto es lo que necesitan mis pechos. Te gustan? Me costó mucho aguantar el poco rato que demoré en venirme. Cuánta leche, tenías ganas de voltear a esta panzona? Prepara la ducha que te alcanzo.
    
    Bajo la lluvia, abrazos y besos, ciertamente era una mujer llena de sorpresas, la forma de excitarse, bien gritona pero deliciosa y sensual, sabía moverse para calentar al hombre. Sus labios saben besar, hábil en hacerme el sexo oral. Comenzó bajo la ducha, pero lo inestable del piso nos obligó a continuar en la cama, le gustaba metérsela en la boca cuando está dormida, sentirla crecer dentro, tragársela hasta el fondo, los dientes recorriendo el tronco, mover la lengua, metiéndola entre la piel del prepucio, aprendió que ese jugueteo me ponía súper excitado, mama y se mira en mis ojos, atenta al menor de mis gestos.
    
    Nunca me habían mamado con tanta intensidad, tampoco tenerla tan dura en un boca tan caliente y jugosa, siente que voy a explotar en su boca, me saca sin dejar de masajearla. Se coloca sobre mí, un increíble sesenta y nueve comienza a moverse sobre mi boca.
    
    Las primeras ...