1. Mi novia Luci, de santa a puta


    Fecha: 10/02/2023, Categorías: Infidelidad Autor: KeyargaSama, Fuente: CuentoRelatos

    ... Mi confesión la tranquilizó, pero solo era verdad a medias, porque sí había habido una mujer, pero solo una, con la que había cogido como Dios manda, culminando con una venida brutal en sus nalgas, pero Luci no tenía por qué saberlo. A veces, tan solo con recordar a mi amiga Mariana mamándomela mientras el pobre diablo que estaba enamorado de ella yacía tirado de borracho en el suelo, la verga se me ponía tan dura, que sentía que me iba a explotar.
    
    Luciana y su amiga Melisa me encontraron barriendo el frente de la casa. La primera me miró con ojos tiernos y la segunda soltó una risotada. No había dos amigas más dispares en todo el pueblo. Luciana era una niña dulce, amable y discreta, mientras que Melisa era la clásica tipa escandalosa y buscavidas que nunca puede faltar en todo pueblo pequeño. Estoy seguro de que si no se hubieran conocido desde prescolar, jamás habrían podido llegar a ser tan buenas amigas.
    
    —¿Y ese milagro que te pusiste a barrer? —Preguntó Melisa, burlona.
    
    —¿Y ese milagro que te dejó salir tu marido? —Respondí yo.
    
    —Mientras ande con Luci, Ramón se queda tranquilo.
    
    —Por un momento pensé que te atreverías a insinuar que no necesitas su permiso.
    
    —No lo necesito, pero no me importa que él piense que sí.
    
    Melisa era una mujer más alta y voluptuosa que Luciana. Tenía alguno que otro kilo de más, pero apropiadamente distribuido en las partes que más nos gusta a los hombres. Su enorme trasero y prominente pecho jamás pasaban desapercibidos. ...
    ... Llevaba tenis, pantalón de mezclilla y una blusa ajustada que dejaba en evidencia su figura curvilínea.
    
    —Me alegra que te pusieras a ayudar a tus papás —dijo Luciana con ternura. Llevaba zapatos de vestir, una blusa holgada y una falta que le llegaba hasta los tobillos. Tenía el cabello trenzado y usaba anteojos—. Con todo esto del virus, los doctores han de estar muy ocupados. Lo mínimo que puedes hacer para ayudarlos es ponerte a barrer.
    
    —Lo que pasa es que estoy esperando visitas —expliqué— ¿Te acuerdas de mi amigo Leonardo, el tipo alto al que te presenté en mi defensa de tesis? Pues me escribió esta mañana y me dijo que iba a pasar saludarme.
    
    —Ya se me hacía raro que anduvieras tan apurado.
    
    —Ni siquiera para recibir a Luciana te pones a barrer la casa —dijo Melisa, entrometida como siempre—. ¿Al menos está guapo tu amigo? ¿Quieres que nos vayamos para que puedas besarte a gusto con él?
    
    Solté una risotada.
    
    —Mejor ayúdenme a limpiar.
    
    Melisa se sentó a hacerse pendeja con su celular, pero entre Luciana y yo dejamos la casa tan limpia como no lo había estado en varias semanas. Éramos un gran equipo. Al terminar, sacamos unos sillones a la cochera y esperamos a mi amigo comiendo sabritas. Luci bebía refresco y Melisa y yo, whisky.
    
    Había sido un golpe de suerte que apareciera mi novia acompañada de su amiga zorra. Así podría jactarme con Leonardo de haberle conseguido una mujer. Conociendo a Melisa, había una probabilidad muy alta de que terminara dándose ...
«1234...8»