Nuestra obra maestra (Primera parte)
Fecha: 07/03/2023,
Categorías:
Hetero
Autor: JulioG, Fuente: CuentoRelatos
... telón se había levantado y el espectáculo daba inicio conmigo como protagonista estelar. Lo que más me gustaba. Me levanté de la silla y me solté el cabello que había amordazado en una coleta, enseguida me posé frente a la piscina y de un salto me clavé hasta el fondo de la refrescante agua cristalina.
Tras bucear un poco salí por el extremo opuesto modelando en una de mis mejores actuaciones al salir en cámara lenta directo al barandal de cristal, mirando justo al frente de aquel edificio exhibiendo mi cuerpo húmedo con aquel bikini blanco que ahora trasparentaba sus telares dejando al descubierto mis redondos pechos y mis pezones cafés a la intemperie.
Acto seguido, les di la espalda, engreída, caminando con profesionalismo sobre el escenario de regreso a mi pedestal bajo el cobijo de una sombrilla playera que me protegiera del sol abrumador. De nuevo tomé postura sensual para que pudiesen admirarme con detalle.
La premier
Entonces apareció aquel hombre galante, imponiendo su autoridad con su sola presencia, regresando al trabajo a todos los obreros que huían despavoridos.
Seguro les habría reprendido, lo pude ver a la distancia, me dio mucha gracia. Comenzaba a enamorarme de aquel hombre simpático y soberbio, quien permanecía supervisando la obra, recargado sobre un pilar haciendo anotaciones en una agenda de cuero negro.
Con disimulo me miraba, ahora con toda claridad a la luz del hermoso día resplandeciente sobre mi piel mojada. Le sonreí, le ...
... coqueteaba como adolecente ingenua, quizá era por el momento. Pero lo cierto era que me encantaba, en todos los sentidos. También le veía, intentando no cruzarle la mirada más de lo debido mientras me llevaba las manos a la nuca para desanudar mi traje.
Segura que me estaría mirando, me quité la parte de arriba de mi bikini haciéndole topless a aquel hombre de traje. Enseguida abrí un poco mis piernas mientras me acariciaba con erotismo mis senos duros por el placer de ser aclamada y deseada por sus ojos indiscretos.
Incontrolablemente me dejaba llevar por los sensuales masajes de mis manos en todo mi cuerpo, estaba realmente excitada, me sentía tranquila, relajada y cómoda, igual que si estuviese en alguno de mis personajes recitando alguna de mis líneas, cuando mis manos llegaban hasta mi entrepierna sobándome con extremo placer, intuyendo lo que vendría.
Jugueteaba como muñeca, encogiendo y estirando mis estilizadas piernas blancas, ahora un poco más bronceadas, rozando la tersa piel de mis muslos, acariciándome las pantorrillas con la planta de mis pequeños pies sonrojados por el sol, al tiempo que mis manos comenzaban a hacer travesuras sobre el tanga de mi traje de baño.
Ya no lo observaba, no hacía falta. Ahí estabas, en primera fila, desde tu palco estelar mirando mi mejor actuación en el papel de tierna zorrita mojada, con mis piernas abiertas, recogidas sobre la silla, tocándome con sensualidad y tremenda excitación.
Entones me separé mi bikini para mostrarte ...