El Vecino Ruidoso Cap. I
Fecha: 11/04/2023,
Categorías:
Bisexuales
Autor: cachopo, Fuente: RelatosEróticos
... –
¿
Te gusta como la mama esta zorra?
- Si tío…
pufff
,
en mi vida me la habían comido así. – Más que mamar me follaba su garganta. Sentía los gorgoteos y arcadas que t
enía mi vecino, pero me daba igual
.
- Jajaja… esto solo lo saben hacer las putas con rabo como esta, una tía nunca lo hará igual. Déjala respirar un poco que todavía te pota encima. – Yo obedecí
,
como siempre
,
y se la saqué. Mi polla estaba llena de babas muy espesas. El policía t
ambién la sacó y se acercó a mí. Me la agarró
y empezó a restregar las babas por mi polla. – Joder es la polla más grande que he visto en mi vida.
- Ya, pero la tuya es más gorda. – Susurré mirando su polla sin tomar ninguna iniciativa.
- Cógela. Así,
apriétala.
Ufff
… está caliente ¿verdad? – El hacía lo mismo que me ordenaba y los dos experimentábamos el mismo placer con nuestras frentes juntas y
l
as respiraciones mezclándose.
En esos momentos ignorábamos totalmente a la puta de mi vecino, que solo jadeaba intentado recuperar el aliento y se tocaba el culo suavemente
,
como comprobando que no estuviera roto. Estuvimos un rato así, en una extraña intimidad, f
rente con frente tocándonos el pecho
, los rabos
..
. Él recogió el sudor de mi pecho, lo olió antes de lamerlo.
L
e copié y la sensación fue indescriptible. Él puso esa sonrisa de cabrón que tanto me turbaba cuando vio como mi pollón daba un bote y soltaba una gran gota ...
... de
precum
,
la cual
recogió y me dio a lamer de su dedo. El sonido de la puerta de mi casa nos sacó de ese trance de puro morbo.
Bueno parece que hay que ir terminando la fiesta por hoy. – Se giró y piso la cabeza de mi vecino contra el sofá, dejándole con el culo en pompa. Se lo abrió con las dos manazas y empezó a darle hostias y a sobarlo. Mi vecino gemía y se retorcía
de gusto y dolor… N
o sabía que podía dar tanto gusto recibir una hostia en el ojete.
- Quiero follármelo. – Fue la primera frase
que dije algo por iniciativa propia.
- ¿Qué has dicho? – El poli me miró con cara de vicio.
- Que quiero destrozarle el culo a esa zorra. – No era una expresión… Deseaba hacerle daño con mi polla, nunca había
tenido ese sentimiento. Siempre he tenido cuidado follando porque sé que lo que tengo entre las piernas no es norm
al, pero ahora mi deseo era totalmente
el
contrario. Quería destrozarlo. Reventarlo. Que gimiese mucho más que con los niñatos
chandaleros
.
- ¿Tú crees que le entrarán las dos? – Dijo el policía abriendo el culo todo lo posible con
sus pulgares
. Mi vecino intentó revolverse y quejarse, pero tenía la cabeza inmovilizada por el pie del agente. - Túmbate en el sofá.
Lo cogió
del cuello y lo levantó
como si no pesase
.
Alejandro e
staba rojo de la presión que había sufrid
o contra e
l sofá, aunque pude ver como
su polla intentaba escapar del suspensorio. Para ser tan pasivo tenía un buen ...