Un viernes para recordar
Fecha: 15/04/2023,
Categorías:
Transexuales
Autor: afuentes, Fuente: CuentoRelatos
... el antifaz, la peluca y la diadema con las orejitas de zorra. Adrián fue por una de las bolsas del súper y sacó una botellita de lubricante vaginal, se acercó a mí y con su mano firme y fuerte comenzó a ponerme un poco en el ano, después tomó la cola de zorra y puso lubricante en el plug anal.
Ven, apóyate en la mesa, vamos a ponerte tu colita.
Yo totalmente obediente me apoyé en la mesa, abrí mis piernas y paré un poco el culo, sentí el frío del plug y mi primera reacción fue contraer el ano, a lo que delicadamente Adrián respondió con una tierna caricia en mi espalda y con un tono de voz dulce y coqueto me pidió me relajara para que entrara fácilmente.
Con un poco de más lubricante y después de un par de intentos aquel plug que no era tan grande se insertó completamente dentro de mí, era una sensación extraña, más cuando trataba de caminar, por momentos sentía que si me movía iba a salir expulsado pero poco a poco fui sintiéndome cómodo con aquel plug.
Ahí estábamos, Adrián y yo abrazados, en una especie de bailoteo a mitad de la sala, le encantaba mirarme convertido en su zorrita. Con aquel accesorio peludo saliendo de mis nalgas y con el antifaz y la peluca que disimulaban mis facciones hombre.
Era el momento de abrir nuestra primera cerveza, tomamos un par de tragos y fue que le pedí a Adrián que se desnudara para mi, así lo hizo y una verga de unos 17 o 18 cm salió disparada cuando se bajó finalmente el bóxer.
Me hinque frente mi hombre, tenía su ...
... verga erecta a unos centímetros de mi cara, el olor era fuerte pero sugerente, quería tragarla de un solo golpe pero el shock de saber lo que estaba por ocurrir me hizo tomarla con una mano y comencé a darle besitos a aquel duro tronco de carne morena.
Acaricié sus huevos, y de forma tímida comencé a meterme la cabeza en mi boca.
Wow, que deliciosa y extraña sensación, me resultaba complicado poder moverme con fluidez, solo sentía un pedazo de carne duro en mi boca, poco a poco me fui adaptando a la nueva sensación y comencé a devorar esa verga como si se tratara de una rica paleta de dulce, alternadamente la sacaba de mi boca para chupar los huevos de Adrián, por un momento atiné a subir la mirada buscando ver su reacción y el tipo estaba en el cielo, con los ojos cerrados y gimiendo.
Me sentí una hembra que le estaba dando placer a su hombre, ya no recordaba el plug dentro de mí. De repente Adrián me detuvo y me ayudó a incorporarme, fuimos al sillón, me recostó delicadamente en él y comenzó a besar mi boca, mi cuello, mi orejas, bajó a mis pezones y comenzó a devorarlos como si se trataran de unos suculentos senos femeninos, poco a poco fue bajando hasta que sentí como me estaba dando un maravilloso sexo oral, mi pene para nada se comparaba al suyo, era evidentemente más chico y extrañamente aunque me sentía sumamente excitado no estaba tan erecto, pero lo disfruté muchísimo.
Adrián se puso de pie y fue de nuevo a las bolsas del súper, sacó un paquete de condones y ...