El regalo: Un antes y un después (Final)
Fecha: 06/05/2023,
Categorías:
Infidelidad
Autor: DestinyWarrior, Fuente: CuentoRelatos
Trigésima tercera parte.
—¡Jajaja! Vamos a ver caballeros. Ustedes se van a quedar aquí quietecitos un momento mientras Silvia y yo decidimos que les vamos a preparar. —Nos dijo Martha muy alegre y bastante despeinada, cubriendo sus preciosas y redondas tetas con las manos abiertas y mi esposa, obsequiándonos la visión de su espalda desnuda, pasando sus brazos por detrás y extendiendo los dedos de las manos, entrecruzó solo los pulgares y moviendo los otros ocho graciosamente sobre sus dos bronceadas nalgas, tratando de evitar, –sin lograrlo del todo– que nos quedáramos extasiados Hugo y yo, admirando como una de ellas, la derecha, subía firme, rotunda y el pliegue que se formaba en la de su izquierda, aparecía encantadoramente, obsequiándonos lo que simulaba ser un ligero guiño. Sonriéndose se alejó hacia el otro nivel, despidiéndose de los dos hombres que la deseaban sin mirar a ninguno y del salón poco iluminado que se quedó huérfano de su hermosa figura semidesnuda.
—Y bueno Hugo… —Le digo cuando nos hemos quedado solos y me acomodo justo a su lado y él cubriendo su evidente excitación con un cojín, sobre su bóxer blanco y yo tranquilo sin señales de erección, con el mío azul oscuro, uno al lado del otro en el mismo sofá. —… Cuénteme algo… ¿Cómo es ese famoso tratamiento que Almudena opina que les podría servir?
—Pues vera usted. –Hugo bebiendo un trago de su Manhattan y yo sin tener a mano lo que más me gustaba beber–. Almudena pensó que lo mejor para los dos ...
... seria permanecer siempre juntos pero con distintas parejas, observándonos en algo que ella llama «Terapia del Espejo». Se trata de realizar exactamente lo mismo que la otra pareja vaya efectuando. Observar y replicar. Reflejos, actos iguales a lo que Martha debía realizar con nuestro amigo David y entre tanto yo con mi áng… ¡Con su esposa, hacerlo igual! —Me respondió Hugo, pero sin mirarme, manteniendo su mirada fija en la penumbra del jardín, unos metros más alla del muro divisorio del iluminado porche. Aún se sentía cohibido ante mi presencia allí y yo, aún no hallaba mi lugar en aquel salón.
—A ver Hugo… ¡Jajaja! –Me reí fingiendo tranquilidad– Esa dichosa terapia aquí conmigo no va a poderla realizar. Porque yo no le voy a indicar a usted como debe hacer sentir a mi mujer. Yo nunca tengo un plan inicial con ella. Cuando es solo sexo, me lanzo a su boca con ganas, aprieto sus pechos con urgida fiereza y hurgó con avidez con mis dedos en su vagina, pero previamente ya la he estimulado con palabras, frases o con imágenes. El alcohol ayuda bastante, y el ambiente lo recreo, según se presenten las circunstancias. ¡Lo inesperado es lo más atrayente! Para cuando deseamos hacernos el amor es muy diferente. A veces solo coloco música ligera, suave y así mismo sin prisas voy adorándola, explorando cada poro de su tersa piel y acariciando sin apuro yo su cuerpo y ella el mío. —El hombre algo inquieto en la esquina del sofá, me miraba con expectación ante la entrega de tantos ...