Donde menos lo esperaba
Fecha: 13/05/2023,
Categorías:
Infidelidad
Autor: dmmexico, Fuente: CuentoRelatos
... bajándolo por los costados de sus anchas caderas y muslos, acompañando el movimiento de las manos con la parte superior de su cuerpo, agachándose y llegando hasta los tobillos, se incorporó y quedo así, totalmente desnuda para solaz y calentura del espectador que disfrutaba el improvisado espectáculo de nudismo en el interior de la habitación.
Laura sacudió las sensuales piernas de las que era dueña, primero la derecha, retirando el bañador que estaba alrededor de sus tobillos, y después la pierna izquierda, por lo que el traje de baño voló hacia un costado, y ella ahora si estaba totalmente desnuda a un lado de la cama, y frente a su maleta, y las dos pendas que había separado previamente, su mano derecha bajo hasta posarse en medio de sus piernas, ahí, procedió a tocar el parche velludo de color rojizo que poblaba su prominente monte de Venus, y uno de sus dedos se deslizo hacia el interior, como queriendo verificar algo, su dedo índice salió de la parte interior de su labia y la piel del dedo brillaba, sin duda, ¡Laura estaba mojada, y realizaba una inspección de su grado de humedad antes de ponerse otra prenda!
Mike sintió un pequeño estremecimiento en su bajo vientre, si ya la deseaba, ahora que la veía completamente desnuda, la anhelaba aún más, le llamo mucho la atención lo rojo de su pelo púbico, era entonces, pelirroja natural, y no por teñirse el pelo, la mujer se dio media vuelta y todavía con una mano moviéndose en medio de su intimidad, reviso lo que había ...
... escogido para ponerse, saco la mano de su área vaginal, y tomo una pequeña tanga color rosa que calzo sobre su humanidad, agachándose una vez más, primero la pierna derecha y después la izquierda, estiro los lados de la prenda íntima y puso los dos hilos por encima de su rotunda cadera, su monte de venus apretado debajo de la minúscula prenda, y el hilo dental metiéndose entre sus grandes nalgas y ofreciendo una hermosa y sensual imagen, tras la operación para ponerse el pequeño calzón, tomo un vestido de tela de algodón, semejante a la tela utilizada en la ropa deportiva, se lo metió por encima de la cabeza, sin usar sujetador, y lo halo hacia abajo, metiendo los brazos por los orificios para finalmente volver a jalarlo hacia abajo y acomodar la falda que, llegaba más o menos una pulgada arriba de sus rodillas, con un vuelo mediano, cómodo, pero que ajustaba a la altura de sus caderas, y se estrechaba sobre su cintura, el frente, se pegaba a sus generosos pechos, y, sin ocultar la rigidez de sus pezones dibujaban su contorno bajo la prenda.
La mujer desapareció del rango visual que cubría el espejo, tal vez entro al baño privado que estaba en el cuarto de su tía, mientras tanto, y todavía con la imagen de aquel cuerpo desnudo, recordó la primera vez que la vio cuando arribo desde su lejana ciudad a refugiarse en casa de sus familiares ante la crisis matrimonial que la perseguía, y la forma en la que su primo la describió: - mi prima ya está medio vieja, pero esta buena, ...