1. La invocación de Fátima


    Fecha: 19/06/2023, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: Damian Rex, Fuente: CuentoRelatos

    ... movimientos sexuales. Era claro que la mujer águila estaba por venirse, lo cual hizo que Fátima buscara estimular con mayor intensidad los cuatro pezones, chupando uno mientras pellizcaba otros dos, cambiando de uno a otro continuamente. De pronto Fátima sintió un sabor nuevo en su boca, era la leche que había comenzado a emanar a chorros de las tetas de la mujer águila mientras esta se venía. Fátima bebió la leche como poseída lo cual le comenzó a producir placer en sus propios pezones y en su clítoris, a la vez que le nublaba la mente. Gradualmente, como perdiéndose en una ensoñación, se vio a si misma siendo penetrada por el hombre bisonte, sus propios brazos se habían convertido en alas y sus cuatro senos rebotaban con el vaivén del monstruo que la poseía e iba incrementando la velocidad. El hombre bisonte resoplaba con fuerza mientras que penetraba a la ahora transformada Fátima, quien sentía un placer intenso en sus cuatro senos al igual que en su clítoris y en el centro de su vientre. Llegaron más demonios atraídos por los gemidos de Fátima: había cuatro pequeños seres con cuatro alas cada uno, que volaron directamente hacia los pezones y comenzaron a chupar sin descanso; además se acercó un ser con cuerpo de mujer, cuernos de carnero y un hermoso pene erecto y jugoso que se posicionó ágilmente detrás de Fátima y comenzó a penetrarla analmente.
    
    El placer que sentía Fátima en su nueva condición quimerezca era absoluto. Sintió cómo la mujer de cuernos de carnero ...
    ... comenzaba a venirse en su ano y sintió las pequeñas lenguas de los voraces seres voladores, finalmente sintió el tremendo poder de las embestidas cada vez más poderosas del hombre bisonte. El gran monstruo que la penetraba de pronto se detuvo, una tensión muscular de enorme poder era visible en su poderoso abdomen y en los músculos de sus cuatro brazos, entonces emitió un sonido y comenzó a echar chorros de semen en la vagina de Fátima, a la vez que su enorme pene pulsaba en diabólico éxtasis. Todo esto le produjo a Fátima una excitación tal que comenzó a venirse por todo su cuerpo: su vagina, su ano, sus cuatro senos que comenzaron a echar chorros de leche, pero también la totalidad de su piel al igual que sus órganos internos. Su ser completo era erógeno, la sensación la hacía retorcerse y convulsionarse, gimiendo sin descanso.
    
    El placer del orgasmo absoluto se manifestó como una luz que pulsaba por todo su cuerpo y alumbraba la totalidad de la caverna infernal. La luz creció a una intensidad cegadora conforme Fátima alcanzaba el punto máximo de su orgasmo.
    
    IV
    
    En un claro del bosque, cubierto por la absoluta oscuridad de una luna nueva, un cuerpo femenino brotaba de la tierra. Con cara humana, cuatro senos que se mezclaron para ser solo dos, alas de águila que se transformaban en brazos, una mujer que había conocido las delicias de los seres ocultos en las sombras, de las manifestaciones más monstruosas del infierno, se abría paso entre la maleza, caminando en el ...