Chica coge con el arrendador en el monte, 2da parte - Relatos Eróticos

Chica coge con el arrendador en el monte, 2da parte

... posiblemente podría escucharlos, claro que eran gritos sexys seductores y paradores de verga, luego de unos minutos ella se puso boca abajo en la cama y él le hecho lubricante en el culo y en sus nalgas, luego se acostó encima de ella y le metió la verga por el culo, así le dio por unos 5 minutos, luego él se acostó boca arriba y ella se le subió encima, ella misma le agarró la verga para metérsela pero no pude ver donde se la metió porque ella estaba sentada encima de él y yo estaba viendo de arriba.
Ella le cabalgó como que estuviera montando a caballo, luego de unos minutos aun estando ella montada sobre él, él pego unos gemidos algo fuertes, ahí supe que había acabado. A todo esto ya eran las 10 de la mañana, solo vi como ella se levantó y le escurrió la leche por sus piernas y se acostó en la cama…
Yo me bajé de donde estaba subido ya que era incomodo estar ahí, y me dirigí a la milpa a iniciar con el trabajo del día.  
A la hora de almuerzo llegó mi mujer a dejarme la comida y le pregunte que porque no había llegado la nena a dejarla, ella me respondió. La Martha llegó a las 11 de la mañana y dice que está bien cansada porque lavo mucha ropa, y se quedó acostada en la amaca… comí con mi mujer ese día pero en mi mente pasaban muchas cosas, “ porque la nena había llegado una hora después que yo los había visto terminar de chimar”… finalizamos de comer y mi mujer quería que la agarrara ahí en el monte como ya era costumbre pero me hice el cansado pues con quién yo ...

... quería chimar no había llegado ese día. Mi mujer se regreso a la casa…
Ese día que regresé a la casa, hablé con la nena, nena ¿Qué paso que no llegaste a dejarme la comida ahora? Ella respondió “ no llegué porque regresé cansada de la casa de don Julio me puso a lavar mucha ropa desde las 8 hasta las 11. Le pregunté  ¿te chimó también?  Ella respondió que no, ahí supe que me estaba mintiendo pues yo los había visto con mis propios ojos, pero no le dije nada pues no quería que supiera que la estaba espiando.
Los días que ella iba a ir a la casa de don Julio eran los lunes y viernes. 
El día martes un día después que ella había estado en la casa de don julio “primer día de trabajo” (sexo en la cama con don julio), llegó a dejarme la comida. Antes de comer la abracé y la empecé a tocar, pero ella no respondía como antes, estaba indiferente. Yo le pregunté ¿Qué pasa? ¿Ya no quieres chimar con migo? Ella respondió, esque tu no me haces lo mismo que me hace don Julio, ahí supe que lo único que yo lo le hacía era mamarle la conchita, rápidamente me agache y le subí una pierna en mi hombro, ella se agarro de mi cabeza y le hice a un lado el calzón y se la empecé a chupar y jugarle las nalgas con mis manos, así como había visto que don Julio se lo hizo ella empezó a gemir y halarme el pelo, luego ella me dice, “papá ahora ponme a mamar tu verga también” sin pensarlo le dí mi verga para que la mamára.
Se prendió como una chiva en su teta, luego la chimé solo por el culo descargando toda ...