LAS PAMPAS CHATAS-final
Fecha: 02/04/2022,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... la cabecera de la cama. Las chicas se acomodaron de rodillas y Erika se la puso en la boca, mientras Juli me pajeaba. Tomé la cabecita de Erika para moverla a mi ritmo. Ella encantada. Luego se la saqué e hice lo mismo con Juliana, para seguir luego con Marilí. «Ponésela a la chicas. Yo puedo esperar, la tuve muchas veces. ¡Debo haber tragado como 10 litros de semen! ¡Jajaja!» Las chicas, divertidas besaron a Marilí por su gentileza. Vuelta la pija entre los labios de Erika, nueva cogida de boca. Mientras Erika la mamaba Juliana chupaba los huevos. Cuando la ponía en la boca de Juli, chupaba Erika. La fui alternando hasta que llegó el momento, justo cuando cada una tenía los labios a cada lado del tronco. «¡Abran bien la boca, con la lengua afuera, muy juntitas!» ¡Cómo yo quería! ¡Un chorrito en cada lengua, sin desperdiciar nada! Compartían lenguas y boca. Se besaron saboreando semen y tragaron, ambas con la mejor sonrisa. Marilí terminó de limpiarla. ¡Todas contentas, como siempre!
“¡Dios, yo no tenía idea de la hora! No sabía si tenía más hambre que sueño. «¡Hey chicos! ¡Vamos a almorzar! Hice ensalada para todos…» «Sí, dale.» Las chicas estaban de acuerdo. Nos acomodamos, desnudos y chorreando, alrededor de la mesa, luego de ordenarla. Marilí trajo la ensalada, la distribuimos y comimos, entre caricias y refregadas. Las chicas no paraban. Yo estaba exhausto. «Chicas…, no se enojen. Me acuesto un rato. ¡Por favor! ¡No doy más!» «¡Jajaja! ¡Qué flojón!» Se burlaban de ...
... mí. «Por supuesto, sin duda tenés que descansar.» Marilí es la única que me tenía piedad. «Tenés que dedicarle a Mari las últimas horas.» En este caso fue Juliana la piadosa. «Eso es. ¡Muy bien!» Menos más que la exuberante y voluptuosa Erika también estuvo de acuerdo. «Nos duchamos y nos vamos, para que disfruten solos.» Juliana tuvo una idea salvadora. «No somos egoístas. Mari se lo merece.» Erika acompañó su sugerencia. «Si, es lo mejor.» «Andá a bañarte y acostate. Descansá bien.» «Para estar entero… para Mari.» Las nenas compartían la idea. ¡Menos mal! Fui a bañarme. Salgo y las chicas están en la cocina. «Me voy a acostar. Quiero decirles que nunca la pasé tan bien y que espero encontrame pronto con ustedes. Son divinas. Marilí no puede tener mejores amigas. Le dejaré todos los datos. No eran palabras de simple compromiso. Un rápido beso a cada una, cosa de no calentarme, y casi corrí a la cama, no la grande, donde habíamos estado, sino a la de la pieza de Marili. Cuando me desperté no estaban, por suerte… Marilí estaba a mi lado. «Las chicas se fueron contentísimas de vos. Esperan verte pronto.» «Espero que vengas con ellas.» «¡Jajaja! ¡Claro! ¡Sos un fenómeno!» «¿Por qué?» «¡Casi diez eyaculaciones en dos horas y media!»
-¿Y qué pasó luego?- Laura estaba apurada por saber el final.
-Y… nos acariciamos, nos besamos…, cogimos un par de veces, usando los condones…, y me fui… ¿Qué otra cosa podía hacer?
-¿Así nomás? ¿La dejaste?
-¡No había otra! Marilí lo sabía. Me ...