HUEVOS REVUELTOS 2 - Relatos Eróticos

HUEVOS REVUELTOS 2

... terrible!
-¿Y la tuya cómo fue?
-¡Jajaja! ¡Ahora vos sos el curioso!
-Es que… La verdad me llama mucho la atención que no tengas amantes…
-¿Amantes? ¿Muchos?
-Bueno… ¡uno aunque sea! ¡Me creás un problema! ¡Estás tan buena que no puedo entenderlo! Por momentos pienso… que… sí… te hubiera conocido antes que Laura…, bueno…, no quiero patear el nido… ¡pero vos serías mi amante!
-¡Jajaja! ¿No lo soy acaso? ¿Qué estamos haciendo? ¿Jugando al tejo? “¡Vos te agachás y yo te la meto!”
-¡Jajaja! Si… tenés razón… Pero tenés que considerar… que es algo circunstancial… - Para darle más “entidad” a la acción, como Clara me había tomado de las manos, acompañando la acción de apretar sus tetas contra mí, retiré una mano y metí un par de dedos en la concha, acompañando la acción de las tetas con mi mano. – Quiero decir, que esto es genial, pero no fui yo quien te buscó… 
-¿No te importo?
-¡SIII! ¡Claro qué me importás! ¡Con toda mi sangre! Pero no te hubiera buscado, nada más por no traicionar a Laurita… ¡Vos lo sabés! ¡La quiero mucho! ¡El problema es que también te estoy queriendo a vos! ¡No sé cómo zafar del deseo que me provocás! ¡Te juro! ¡24 horas de cada 24, estaría junto a vos! 
-Yo también…
-Pero no me contestaste… ¿Por qué no tenés un hombre junto a vos? Entendés lo que te digo. ¡No estoy hablando de mí!
-Para mí también es un problema… ¡Vos sos el problema! ¡Tampoco quiero traicionar a mi amiga! Desde que te conocí, la primera vez que viniste a comprar cigarrillos, ...

... pensé… que me gustaría… acostarme con vos. ¡Esa es la verdad! Y fue a mí a quien conociste antes que a Laura. ¡Te olvidaste!
-Quise decir que con ella fue la primera con la que cambié palabras de… tono… personal…, intimista… que… bueno… terminamos en mi cama…
-Reconozco que Laura fue más decidida… Antes que yo dijera nada… ¡ella me dijo que le gustabas! Pero no tengo bronca ni rabia. Me gusta verla feliz. ¡Yo también la quiero mucho!
-Seguís sin contestarme… 
-¿Y si en lugar de contestarte… te hago una buena mamada? ¡Jajaja! - ¡Y casi me arranca la pija al ponérsela toda en la boca! - ¡MMMMMMMM! ¡Qué rica!
	Y si antes yo estaba en el cielo… ¡ahora estaba en el paraíso! Como no había dejado de serrucharle la concha con los dedos…, estábamos a mano… ¡El orgasmo fue mutuo! 
-¡Soltame qué quiero chuparte el juguito calentito! 
-¡Jajaja! ¡Esto es más rico que las preguntas y respuestas! – Clara seguía saliendo con la suya.  
	Me lancé hacia su entrepierna para chupar. ¡Como siempre riquísima! Cuando levanté la cabeza, Clara me miraba sonriente.
-¡Dale! ¡Contestame! – Yo insistía. Me acomodé a su lado y la besé en la boca.
-Sos tan cariñoso que no te puedo negar nada… - Seguí besando su rostro. – Empecé un poco más tarde que Micaela. Más o menos con la edad que tenía la que luego fue tu esposa, cuando te la cogiste en el baño…, degeneradito…
-Se estaba peinando y yo estaba sentado sobre la tapa del inodoro. No hacíamos ninguna asquerosidad.
-¡Jajaja! Bueno te cuento… ...