1. Sexo en la vieja hidroeléctrica -5 bis- Una semana más tarde


    Fecha: 31/07/2018, Categorías: Otras Categorías, Autor: superrapado, Fuente: CuentoRelatos

    ... trae sin cuidado?
    
    Para mí, también es placer que se sienta satisfecha.
    
    -¿Me quiere dejar satisfecho? Pues fuérceme a que engulla su pedazo de rabo.
    
    -No me comprende. O no quiere comprenderme.
    
    En la hidroeléctrica yo obtuve lo mío. Pero no vi nada en usted identificable con una satisfacción plena.
    
    Si debo creerle, disfrutó, pero en su casa, lejos de mi mirada. Es como si mi esposa se fuera al cuarto de baño a provocarse el éxtasis. Tal actitud me insulta.
    
    -¿Cómo puede pensar...?
    
    -En la narración de los encuentros con su contacto, me hablaba de que con él alcanzaba el nirvana sexual.
    
    -¡Pero yo pensaba en usted!
    
    -Pues parece ser que pensar en mí le es más satisfactorio que tenerme en carne y hueso.
    
    -No, se equivoca. Yo no pretendía... Dígame lo que quiere.
    
    -Para empezar, ayúdeme a encontrar el cadáver de Cipriano.
    
    -¡Le estoy ayudando!
    
    -¡Pues ayúdeme más!
    
    Desbordado por sus emociones, el administrativo estalla:
    
    -Usted me tortura. Me somete a un insoportable maltrato psicológico.
    
    -Si le quisiera maltratar no le habría traído unas pastas.
    
    -¡Métaselas donde le quepan!
    
    El administrativo suelta la caja de cartón sobre la lápida e comienza a desandar el camino.
    
    -Muy bien, váyase. Me quedaré aquí solo buscando pistas. Y metiéndome las pastas donde me quepan -le grita el agente.
    
    El administrativo se detiene, vuelve la cabeza y ve al rural con gesto enfadado. Tras un momento de duda regresa junto a él.
    
    -¿No se iba?
    
    -No ...
    ... puedo. Me ha seducido y me siento un pelele de su voluntad. Ha sabido mover perfectamente sus fichas. Igual que con el dominó.
    
    El uniformado toma la caja de pastas de sobre la lápida y se la devuelve.
    
    -Tenga. Son suyas. Después me aseguraré de que se las coma y me dé una opinión. Mi esposa la espera.
    
    El agente sigue hablando mientras se mueve en torno a la sepultura.
    
    -He tenido una charla con la nuera de la fallecida. Me dijo que tardaron tres días en sepultar a Teresita Carmen porque hubo problemas con el acta de defunción. Es decir, que, a pesar de estar la fosa cavada y lista, no acogió a su residente oficial hasta casi cuarenta y ocho horas más tarde de lo que se tenía previsto.
    
    El administrativo ha abierto la caja de las pastas, ha tomado una que tiene forma de estrella y la mastica con aire apesadumbrado.
    
    -Si usted hubiera matado a un hombre y quisiera ocultarlo... -sigue su exposición el rural, pero se interrumpe cuando se percata de que no está siendo escuchado- ¿Son de su agrado?
    
    -¿Cómo dice?
    
    -Le pregunto si las pastas son de su agrado.
    
    -No. Están secas. Pero me las comeré porque usted lo quiere.
    
    -Casi ha hecho una descripción de la personalidad de mi parienta. Pero me gustaría que atendiese a mis preguntas sobre el caso.
    
    -Como usted ordene, herr agente.
    
    -Decía que ...
    
    -¿Cómo sabía el padre del asesinado padre que había una tumba lista y vacía?
    
    Las palabras salen de la garganta del empleado municipal acompañadas de migajas del ...
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