LA TÍA SIGUE SIENDO CURIOSA 4 - Relatos Eróticos

LA TÍA SIGUE SIENDO CURIOSA 4

... boca. Sin sacársela de la boca, fue girando sobre la cama. Queda con el culo hacia mi cabeza. Acomodándose sobre mí, quedó un hermoso 69 impulsado por su propio placer. En el momento que me puse a chupar, besar y lamer, Lauri acentuó la mamada. La pija entraba y salía de su boca, al ritmo que ella le daba. Subía y bajaba su cabeza, de manera de auto cogerse. Yo había tomado sus glúteos y mi cabeza subia hasta el ano y bajaba hasta el clítoris. La lengua recorria toda la trayectoria desde el orto al clítoris. Un poquito con los dientes, apretaba los labios externos. La calentura era infinita. ¡Laura era un terremoto! ¡Mamaba con deseperación!
-Mami…, tesoro… Pará un poquito. No quiero acabar tan pronto. Laurita se levantó. Prestamente se acomdó boca arriba, levantando las piernas. Fui a su concha con mi boca. Nueva chupada, ahora ayudada por los dedos. Le meti dos dedos y con el pulgar acariciaba su clítoris, para arriba, para abajo, hacia un lado y otro. Lauri comenzó a agitarse. El orgasmo estaba cerca. Acentué las caricias y lamidas. Se extremeció y largo sus fluidos hacia mi cara. Chupé y tragué todo lo que puede. Estaba a punto para penetrarla…
-¡Papito! ¡Quiero qué me cojas en el sofá. - Quería cambiar de posición.
Me hizo sentar y se montó de frente, guiando la pija a la concha. Comenzó a cabalgar despacito…, aumentando de velocidad, poco a poco. Yo lamia los pezones. No podía chuparlos por sus movimientos. Las tetas no se quedaban quietas. Sus sacudidas eran ...

... espectaculares. No dejaba de gemir, suspirar, dar grititos.
-¡Así! ¡Así! ¡Así papito! ¡Dale! – En realidad ella hacía todo el “trabajo”. Yo teniá las manos sobre sus caderas y acompañaba su vaivén.
-¡Siii! ¡Siiii! ¡Me vieneeee! ¡Yaaa! - Una nueva y hermosa acabada. 
Pasaron unos segundos para regularizar la respiración…, y sin sacarla giró para ponerse de espalda a mí. ¡Qué hermoso culo! Veía como entraba y salía la pija…, antes de su nuevo orgasmo. La ingle, mis piernas…, y el sofá, totalmente mojados. Ahora es la mía. La levanté y la puse en cuatro, con la cabeza apoyada en el respaldo… Le chupé ardientemente el culo, glúteos, raya y hoyito, la lengua entró todo lo posible en la hendidura entre las nalgas… Mucha saliva, mucha humedad hice llegar al arrugadito hoyito. Me paré y apoyé el glande en el ano. Empujé y fui entrando suave y seguro… 
-¡Ah! ¡Ah! ¡Papi… qué lindo! - Seguí empujando. - ¡Si, si! ¡Hasta el fondo mi amor!
La clavé totalmente. Mis huevos apretados contra el perineo y la concha. La mano de Laura estaba abajo. Sus dedos acariciaban los testículos. Yo bombeaba rítmicamente. Laura movia sus caderas a mi ritmo.  
-Mi amor… ¿te lleno el culo o preferís la boca? 
-¡La boca, la boca! ¡Avisame!
-¡Ahora! - Salí al tiempo que Lauri giraba a toda velocidad para arrodillarse frente a mí. Su abierta boca y su lengua afuera, recibieron todo mi semen. Tragó sonriebnte y la limpio prolijamente…
-Ah, mi amor, acabé nuevamente mientras me la tragaba. ¡Qué rico! ¡Qué ...