UNA ALUMNA APLICADA
Fecha: 02/07/2022,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... Aceptó enseguida, así que lo hicimos. Ella me dijo que le contó al hermano, y él se puso muy contento. Cuando nos estábamos acariciando…, el hermano apareció… “sorpresivamente”. Ella le dijo que yo quería conocerlo y él me dijo que también quería conocerme. ¡Qué grande y hermoso! Lo primero que hizo fue besarme, primero en la boca, y metió la lengua, y luego en la cachucha… y me hice pis! Me dio mucha vergüenza, pero me dijo que no me haga problemas, que era juguito muy rico. ¡A él le gustó mucho! Luego se lo hizo a la hermanita, mientras me metía los dedos en la cachucha. ¡Era riquísimo! Yo tenía unas ganas bárbaras de saber cómo era si me metía el pito. Luego de chupársela a la hermana, y hacer que a ella también le viniera el juguito, me hizo recostarme contra el respaldo del sofá, me levantó las piernas y se puso arriba mío. Entonces la hermana le agarró el pito, que estaba durísimo, me corrió la bombacha, y lo puso a la entrada de mi cachucha. Él empujó para dentro. La hermana ya me había dicho que la primera vez duele un poquito…, pero pasa enseguida y luego da mucho gusto. Fue así. Al minuto, el chico me la estaba moviendo dentro. La sacaba y la metía. A la hermanita le metía los dedos, y se los movía al mismo ritmo que lo hacía conmigo. La hermanita me lo había dicho, me iba a dejar una lechita calentita adentro, que era muy rica. Ella ya la había probado una vez que se la dejó en la boca. Cuando sentí el calorcito dentro de la cachucha me sentí bárbara. Luego de un ...
... ratito en que nos quedamos quietos, el chico salió de adentro mío y se la metió a la hermana. A mí me metió los dedos y vi como chorreaba la lechita de mi cachucha. Con los dedos levanté un poquito y lo llevé a la boca. Algo así como saladita y agria. ¡Me gustó mucho! Luego de un ratito mi amiguita también largó el juguito. Yo miraba como lo hacía. Cuando la apretó fuerte, como me hizo a mí, le largó la lechita y salió. Como yo estaba sentada en el sofá, mirando, él se puso de rodillas a mi lado y me dijo que le limpiara el pito con la lengua. ¡Riquísimo! ¡La primera vez que chupé una pija! Eso lo hicimos un montón de veces, cada vez que podíamos estar solos, en su casa o la mía. Después de ésta oportunidad, hice lo mismo con las otras tres amiguitas que tenían hermanos que me gustaban, y al final, casi todos los días cogía con alguna o alguno.
“«Claro, todo esto que te conté no pasó en dos días… Fue casi un año que estuve tratando de enganchar a las chicas y sus hermanos…, pero los dos años siguientes no tuve ningún problema de “coger” casi todos los días. Cuando no podía, o pasaba más de un día, me acariciaba yo misma. ¡No tenés idea de todo el juguito que aprendí a largar…! ¡Temblaba toda, sobre todo cuando me la chupaban! A los chicos les gustaba mucho. Hasta aprendí a tragarme la lechita que me dejaban en la boca. A una de las chicas el hermano se la había metido en la cola…, y me enseñó a mí como hacerlo sin que me duela. Primero con los dedos y mucha cremita. Al final ...