1. Viaje con permitidos (2): Sexo en el hotel


    Fecha: 20/09/2018, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Nazareno Cruz, Fuente: CuentoRelatos

    ... una mujer que está transitando ese momento inexplicable que deviene de vivir el frenesí que la subió a la cima, ahora se desliza al abismo del relax que reconforta el espíritu y renueva las ganas de volver a vivirlo.
    
    Sin darle demasiado tiempo a perderse en su abismo, la volví a ponerse a escalar un nuevo orgasmo. Montado, entre sus piernas, lamiendo sus pechos, entrando en ella con las ganas de una semana de abstinencia, me muevo con ímpetu y profundidad, sus manos se alternan tomándose de sus muslos para favorecer más y mejor penetración con el abrazo para tenerme sobre sus pechos.
    
    La pausa en la salvaje penetración, permite el beso, intensivo y profundo, con la lengua a todo dar.
    
    Retomar la introducción vehemente y acerada de la pija, moviéndome con fuerza, mis brazos apoyados a los costados de su cara permiten una visión elevada de sus pechos y su cara, también moverme con mayor amplitud de movimientos, un breve orgasmo acelera mis sentidos. Un momento de lucidez de Ethel le hace recordar que la fecha no permite el riesgo de venirme dentro de ella…
    
    - No te vengas dentro, estas fechas son peligrosas, por favor, dentro no.
    
    Recordaba cuando me contó de sus fantasías producidas por la visión de una película porno, venirme en su boca ya lo habíamos hecho aunque tan solo en parte, el sexo anal está pendiente…
    
    - Tranqui, déjate llevar, no voy a correrme dentro tuyo.
    
    Retomé el ritmo, moviéndome con renovados bríos y motivaciones, tenía decidido venirme en ...
    ... su boca, pero esta vez completito. Seguí dándole verga, con fuerza, metiendo y empujando hasta el instante, me salí con la premura de llegar a tiempo para ponérsela en la boca, ahorcajado sobre su pecho, frotando mis testículos sobre sus tetotas, sabe y entiende que busco su boca para dejarle mi eyaculación, abre los labios, asoma la lengua. Apoyé la pija entre sus labios masturbando con intensidad para descargar hasta la última gota de mi semen dentro de la boca de mi mujer.
    
    No hizo gesto alguno, solo quedé dentro de su boca, esperando… Sus ojos se fijaron en los míos, esperaba una orden, una sonrisa y el movimiento de afirmación fueron la señal que debía tragársela. Un movimiento de la glotis y se tragó todo mi semen, sin dejar de mirarme buscaba la aprobación de su hombre, ofrecí el resto, esa última gotita que asomaba en el glande, su lengua recogió esa perla, frotó sus labios para degustarla.
    
    El beso de su hombre fue la calificación de su tarea, su fantasía había sido cumplida, mi deseo de vaciarme en su boca cumplió la mía.
    
    Abrazados descansamos hasta que llegaron los emparedados, la cerveza reconfortó de los calores de la calentura.
    
    Luego hubo otros dos polvos más, uno terminado en su boca el otro sobre sus pechos, la modorra y el relax no llevaron a un sueño reparador, enredados en los sueños futuros de volver a disfrutarnos.
    
    Pero la pasión aún nos tenía deparado un último round antes de emprender el camino.
    
    Mentalmente nos vamos preparando para ...
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