TAREAS EDUCATIVAS 2
Fecha: 29/06/2023,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... a su mamá.
-¿Y? ¿Cuál es más rica? – Siempre la más interesada es Jazmín.
-Ambas…, imposible una preminencia. Las dos son exquisitas…, aunque tienen sabor distinto… - Eso es no sólo por la edad, sino que la nena había acabado hace apenas una hora, cuando estaba cogiendo conmigo. Danna estaba “seca” desde más temprano, cuando se fue a preparar la cena. – Así que sin la menor duda a ti te saborearán como a mamá.
-¡Yo quiero que me saborees tú, ningún otro!
-¡Nena! ¡No seas tan imperativa! – La mamá sabe muy bien que hay muchas pijas para elegir. - ¿Y vos?
-¿Yo qué?
-¿Qué sabor tienes?
-Ya lo probaste…
-No totalmente. – Danna no quiere quedar en segundo lugar. Sabe que la hija le lleva ventaja en eso. - Vamos a probar…
-Déjame acostarme, sino la comida me va a caer mal… - Fuimos al dormitorio y mientras yo retozaba boca arriba, ambas se dedicaban a lamer, besar, chupar, mamar, sorber…, alternándose con tronco, testículos y glande. Yo encantado…, aunque trataba de pensar en otra cosa…, para no tener deseos de eyacular. Luego unos 20-30 minutos, se acostaron junto a mí.
-Bueno chicas…, ahora sí. Voy al baño a ponerme en condiciones.
-¡Muy bien! ¡En inmejorables condiciones! – Es Danna quien tomó la batuta.
Fui a la campera donde tenía las pastillitas y, sin disimulo, las tomé.
-¿Ven lo que hago? Quiero estar inmejorable… ¡jajaja!
Volví silenciosamente a los 15 minutos, más o menos. Madre e hija estaban haciendo un espectacular 69, totalmente enfrascadas y ...
... olvidadas del mundo. Chupaban desaforadamente. Seguramente la mamá había sido la promotora…, y estaba arriba, cosa rara, ya que era más grande y pesada… Me detuve en la puerta, para masturbarme. Cuando estuve a punto, fui directo al culo de la madre.
-¡Eso papito! ¡Te estaba esperando! – Y se la clavé de una, hasta el fondo.
Mientras yo bombeaba, Jazmín lamía mis huevos. Se me ocurrió pensar que esto lo había preparado la madre. Me agaché sobre la espalda de Danna, tomándole las tetas. Mientras la besaba y lamía su aterciopelada piel, pensé, en un momento, qué si soy pervertido, esta mina me gana de lejos…, un instante nomás. Luego seguí con lo mío. Las chicas también. La nena iba con su lengua de la concha de la madre a mis huevos. Yo hubiera querido abrazarla y ponerla de rodillas, para aprisionarla entre los brazos, para que la penetración fuera más dura, pero no quería que Danna abandonara la concha de Jazmín. ¡Gemían como locas!
¡Al fin les vino los orgasmos! Se sacudieron al unísono. Me incorporé al estremecimiento común y descargué una furiosa eyaculación. ¡El juego de las minas me habían súper calentado! Nos quedamos “tirados” los tres. ¡Fue fantástico!
-¡Papito! ¡La locura! ¡Me llegó el semen a la garganta! – Danna estaba a los gritos.
-¡Mamita! Déjame salir, que quiero chuparte el potito…
Cuando Jazmín se arrastraba bajo el cuerpo de la madre, luego de sacársela fui hacia la boca de Danna. ¡Quería chupar los jugos de la nena! Así quedó mamá entre la boca de su ...