1. Patas arriba (XX)


    Fecha: 11/10/2018, Categorías: Incesto Autor: Anderson, Fuente: CuentoRelatos

    ... revelará. Simplemente quiero hacer constar que es probable que tenga un hijo anterior a mi matrimonio, era un joven soltero, diplomático de poca gradación, pero el trabajar fuera de España se me subió a la cabeza y ese verano cometí muchas locuras, aunque hay una de la que no me arrepiento: el tiempo que pasé con Lola. Sé que fui un cobarde al no hacerme responsable, pero me dio mucho miedo el pensar lo que podría pasar con mis planes de futuro y aunque sé que está bien, mis contactos sólo me dijeron que sospechaban que estaba embarazada, luego no quise saber más, preferí pecar de ignorante que de irresponsable, soy un tonto lo sé, pero es lo que tiene la inmadura juventud, como sea, si es cierto que Lola estaba embarazada, la criatura ha de tener ahora un par de años o tres, sólo espero que no pase necesidad por mi estupidez. En este sobre incluyo toda la documentación por si esa criatura quiere mi apellido, además, hay una carta sellada para Lola, pido que se le entregue a ella sin que la lea nadie más y haré una última petición: a toda mi familia, a Lola y a ese posible niño, quiero pediros perdón por ser tan cobarde, por no hacerme cargo de mis responsabilidades y por temer algo que no sabría si sucedería más que el saber que es probable que dos personas lo pasen mal por mi culpa.
    
    De todo corazón, perdón.”
    
    En el sobre, además de una declaración jurada sobre mi origen, donde estaba el espacio para que pusiera mi nombre y el sobre sellado para mamá, Lucas sacó algo ...
    ... que no entendí: era un folio con una escritura extraña, pero que Pedro cogió al instante, lo leyó y nos dijo:
    
    - Esto, jóvenes, es un testamento, vuestro padre os dejó una pequeña fortuna en un banco en Grecia, este es el documento legal, en aquella época podía extenderse un traspaso al portador, lo bueno es que todavía está vigente, si queréis, puedo usar mis contactos para cobrar la herencia y entregaros el dinero, de hecho, esa es la instrucción que garabateó en este pedazo de papel, lo que no sé es para qué la escribió en griego, pero es lo que pone.
    
    - Me parece bien -dijo Lucas-, aunque la verdad no me hace falta ese dinero, viendo el remordimiento de papá, creo que puedes quedártelo, Cami.
    
    - No tengo objeción con que te hagas cargo, Pedro -dije con una sonrisa, pero luego me volví a mi hermano-, a mí tampoco me hace falta el dinero y la verdad es que si él me hubiera reconocido no habría tenido una vida tan feliz como la que he vivido y vivo, así que tengo una idea, pero no estoy seguro, igual el dinero no está aquí todavía, así que en cuanto le dé forma lo hablamos, ¿te parece, hermano?
    
    Nunca me he sentido tan contento como cuando puedo llamar “hermano” a Lucas, lo que más me alegra es que él me corresponde el sentimiento, creo que en el fondo era lo que los dos necesitábamos: un hermano que nos comprendiera y apoyase. Aunque me impresionó mucho que pese a estar al tanto de la suerte de mamá, mi padre simplemente no se hiciese cargo de nada, en fin, era otro ...