1. Manos mágicas


    Fecha: 10/10/2023, Categorías: Infidelidad Autor: Fd, Fuente: CuentoRelatos

    ... caricia.
    
    Sus brazos fuertes comenzaron con caricias suaves y poco a poco fue más enérgico y atrevido. Me tomo la mano y acaricio mis dedos masajeo cada falange, rozó mi pierna con delicadeza sentí su mano por la parte interna de mis muslo, acarició mi rostro, mi oreja, la curva de mi cuello, no pude evitar la piel de gallina cuando rozó la parte donde comienza a terminar el cabello, paso uno de sus dedos por mis labios eso me provocó chuparlo y así lo hice cuando Lucas entendió mi gesto y dejó su dedo medio en mi boca, mi sexo palpitaba de ganas imaginando que lo que tenía en mi boca era su falo.
    
    Pareció una eternidad antes que sacara su dedo de mi boca y tocará por primera vez en toda la mañana mis pechos provocando que se me escapara un gemido. Él sonrió. Acarició la delicada piel de una forma deliciosa hasta erizarla y endurecerla, luego hizo girar mis pezones con un par de dedos hasta que mi protesta entre dolor y placer lo hizo detenerse.
    
    Fue hasta entonces que me atrajo a él, saqué hasta las rodillas la parte baja de su uniforme. Pude ver por primera vez su miembro. Tenía una verga hermosa gruesa y venuda, no era más larga que la de mi marido pero sí mucho más gruesa y firme, no me di cuenta en qué momento mordí mis labios con deseos pero la sonrisa de él me regresó a la realidad.
    
    Me senté sobre su regazo rosa do su daga con mi sexo, moviéndome un poco de arriba a abajo para acariciar mis labios con la dureza de su hombría.
    
    En ese momento me sentía sin ...
    ... aliento y un calor invadió mi rostro, mi corazón estaba desbocado como si fuera a salirse del pecho. Lucas dudó y se detuvo separando su boca de mis pechos.
    
    Lo miré, parecía un adolescente en su primera cita.
    
    -Sigue -susurre mientras con una mano tomaba su polla y la dirigía a mi interior.
    
    Lo comencé a cabalgar. Cuando entró en mí me quedé sin respirar por una fracción de segundo vaya que era grueso, vaya que me llenaba de una forma diferente, fui bajando poco a poco, centímetro a centímetro hasta que me lleno toda y quede sentada sobre sus piernas y podía sentir sus bolas en mis nalgas. Lo bese en ese momento recorrí su boca, explore con mi lengua sus labios que sabían a menta. El abrió sus labios y las lenguas se entrelazaron, comenzó así un baile. Yo subía y bajaba, él acariciaba mis piernas, su mano subía y bajaba por mi espalda, hasta mi cabello y regresaba a mis nalgas. Su boca se debatía entre mi boca y mis tetas, las sujetaba y succionaba de una forma mágica.
    
    Estaba al borde y Lucas lo noto, una de sus manos busco mi cabello y dio un fuerte jalón que dejó mi cuello a su alcance, el orgasmo que me regaló fue brutal y me obligó a tomar su cabeza y ahogar en ella los gritos de placer mientras mis manos se aferraban a su cabello.
    
    En cuanto me repuse me tomó de la cintura y sin salir de mi me depositó en el sillón, ahora era él quien llevaba el ritmo.
    
    Sus ojos estaban en los míos. Él ángulo que lograba de esa forma era mágico, su verga acariciaba cada ...