1. Despedida de soltera, mi hermano el stripper


    Fecha: 21/11/2023, Categorías: Incesto Autor: Ivanvorpatril, Fuente: CuentoRelatos

    ... aguantado tuvo que ser una gran corrida pues mi amiga volvió a lamerme el xumino y aún saboreó el semen que rezumaba.
    
    Estaba claro que la fiesta se había convertido en una orgia. Se habían desembalado los dildos que mas de una le había regalado a la novia y por todas las superficies un poco cómodas se veían chicas disfrutando de sus cuerpos, muchas, prácticamente todas, juntas y mezcladas.
    
    Mi hermano me dijo al oído:
    
    - Ya he cobrado y están todas distraídas. Vámonos.
    
    Nos despedimos a la francesa. Los tangas, ni el mío ni el suyo, aparecieron ni nos molestamos mucho en buscarlos. Agarré la falda y el top y me fui tras el duro culo del estríper hacia la cocina donde él tenía sus vaqueros y su camiseta.
    
    Nos vestimos como pudimos y salimos a la a esas horas desierta urbanización. Como yo no estaba en condiciones de conducir había ido en taxi con otras chicas. Pero mi hermano tenía su coche allí al lado. Ahora me explicaba como había podido pagarlo sin pedirle dinero a nuestros padres.
    
    Me subí al asiento del pasajero con el coño aun soltando su lefa. Iba a manchar el asiento, lo que no le impartan un pimiento. A saber cuantas antes que yo habrían dejado sus jugos en esa tela.
    
    Antes de arrancar se inclinó hacia mi y me dio un morreo que me sacó toda la saliva de la boca con su lengua rozando mi campanilla. Su mano fue sola hacia mis tetas por dentro del escote pellizcando mis durísimos pezones con suavidad.
    
    No hacía ni quince minutos que él se había corrido ...
    ... pero aun así poniendo mi mano sobre su bragueta pude apreciar la potencia y el tamaño de la polla de mi hermanito.
    
    Por fin arrancó y nos alejamos de allí. Pero durante todo el camino no apartó la mano de mi muslo y a veces de mi coñito que chorreaba.
    
    Cuando llegamos a casa, tirando de su mano lo arrastré a mi habitación. Su polla volvía a estar en condiciones, puede que por ver mi culito que la falda recogida en la cintura le enseñaba subiendo delante de él por las escaleras.
    
    Mi ropa, la poca que tenía cayó al suelo sin mas preámbulos y la suya se la arranqué con impaciencia.
    
    -¡Follame! Tato.
    
    Él quería seguir jugando y me hizo sentar sobre su cara para comerme entera lo que apenas había podido probar en la despedida. No solo maneja bien la polla, con la lengua hace maravillas.
    
    Clavándomela en el xixi y en el ano me hizo ver las estrellas. Ensalivando bien mi culo me hizo moverme hasta su cadera donde yo sola me la clavé. El glande pasaba firme dilatando el esfínter.
    
    Me mordía la mano para evitar que nuestros padres oyeran mis gemidos mientras subía y bajaba sobre su pubis. No dejaba de acariciarme el clítoris potenciando el orgasmo que me llegaba.
    
    Me derrumbé sobre su torso poderoso, hundiendo la cabeza en el hueco entre su cuello y su hombro. Sin sacarme la polla del culo, aplastando mis tetas sobre su pecho.
    
    Dándole besos en el cuello, lamiendo el filo de su mandíbula mientras recuperaba el ritmo de mi respiración. Me rodeó con sus fuertes brazos. ...
«12...4567»