Traiciones y golpes de suerte
Fecha: 18/05/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... unas sirenas de la policía se acercaban, decidí no resistirme. Con lo que tenían no me caería una condena muy grande y entraba dentro de lo que había calculado.
Si no me llego a adelantar a estos dos, me habría comido unos cuantos años largos a la sombra, la risa también venía por saber que los planos que le iban a vender a la otra empresa no valían para nada. El pequeño fallo en el diseño echaba por tierra la estructura entera del nuevo avión que pensaba presentar esa empresa a costa del diseño de la empresa de Doña Consuelo y Laura.
Me llevaron a comisaría para interrogarme, alguna ostia que otra me lleve, pero yo no dije nada. Me pusieron el peor abogado de oficio del mundo, en el juicio aparecieron los videos de mí entrando en la empresa, pero también se veía que había entrado me había dado media vuelta y no había robado nada. De no ser por la ayuda de doña Consuelo y Laura hubiera estado jodido.
Eso era otro clavo más en el ataúd de mi matrimonio, fue Eva quien se coló para conseguir los videos para incriminarme, lo que ella no sabía era que yo había previsto esa maniobra y las imágenes de los videos fueron las que menos daño podrían hacerme.
Al concluir el juicio me cayeron cinco años de condena, no estaba mal, podría haber sido peor, si estos dos no se hubieran confiado.
Los cinco años en la cárcel no fueron un paseo de rosas, Álvaro contrato gente para que me sacaran a golpes donde había escondido los planos buenos. Tuve que utilizar todo lo que había ...
... aprendido de hapkido para que no me mataran allí a dentro, el alcaide de la prisión decreto que me metieran en una celda de aislamiento por mi protección y sobre todo por la de los demás.
No mate a nadie, eso lo tenía claro. No pensaba pasar ni un día de más en esa cárcel y si terminaba matando a alguien mi condena se incrementaría. El alcaide me permitió la lectura y yo aproveche todo ese tiempo para aprender idiomas, perfeccione el inglés, aprendí el ruso. Por fin llego el día de mi liberación, cuando salí y mire al cielo pude ver el sol sin cuatro paredes que me molestaran e impidieran ver bien el cielo.
Fuera me estaban esperando Laura y una desmejorada Doña Consuelo, bese a Laura y después me agache para besar a Consuelo. Al hacerlo no pude evitar ponerme a llorar, en la última visita que tuve de Laura me contó como le habían encontrado una enfermedad mortal e irreversible. La verdad es que pensé que para cuando saliera ya no volvería a ver a esa anciana, dura como el pedernal pero con un gran corazón.
• Bueno joven, ya ves el panorama, quiero pedirte algo. – dijo Doña Consuelo.
• Usted dirá – dije yo.
• Yo ya estoy en las últimas, quiero que seas el protector de Laura, ella es una mujer fuerte, pero cuando saquemos nuestro nuevo diseño, no quiero correr los menores riesgos – dijo Doña Consuelo
• Eso no tienes ni que pedirlo, pero no creo que le haga falta que la defienda, con el carácter que tiene – dije yo.
• Si en eso ha salido a mí – se empezó a ...