1. El calvario de Luciana (12)


    Fecha: 20/10/2018, Categorías: Gays Autor: señoreduardo, Fuente: CuentoRelatos

    En determinado momento, luego de horas y horas de infructuosas lucubraciones, sin haber almorzado y en cambio consumido un litro de café en sucesivos pocillos, se echó hacia atrás en el sillón y se preguntó una vez más:
    
    -¿Podría yo vivir sin ella, sin yacer en su cama, sin sentir sus manos, sus labios y su lengua en todo mi cuerpo, sin ir a la mansión, sin padecer pero también gozar la crueldad de Elba, sus castigos y humillaciones? ¿Podría yo prescindir de todo eso? ¿Podría yo vivir otra vez como la mujer normal, común y corriente que era hasta que Luciana apareció en la inmobiliaria?
    
    -¡¡¡Noooooo!!! ¡¡¡No podría!!! ¡¡¡No podría!!! ¡¡¡No podría!!! –gritó y mientras gritaba se echó hacia delante con los codos en las rodillas y el rostro sobre las palmas de sus manos. Y lloró, lloró hasta agotar sus lágrimas y cuando las hubo agotado se tendió en el piso en posición fetal hasta que el agotamiento por tanta tensión hizo que se durmiera. Pero fue un sueño nervioso, agitado por pesadillas, como ésa en la que se veía en las garras de un enorme pajarraco que la levantaba con sus garras y la llevaba volando a la mansión.
    
    Despertó bañada en sudor, respirando con dificultad y preguntándose si ese enorme pajarraco de color naranja que la había llevado indefensa a la mansión no simbolizaría su irrefrenable deseo de estar con Emilia, sometida por completo a ella. Echada aún en el piso pensó que si se entregaba, si aceptaba vivir como su Ama lo decidiera, se acabaría toda ...
    ... responsabilidad, toda tensión; significaría no tener que elegir si hacer o no hacer determinada cosa, sólo obedecer. Sin embargo el miedo subsistía. ¿Sería capaz Emilia de borrar de un plumazo su vida normal? ¿su vida familiar, su vida de empresaria exitosa? ¿sus relaciones de amistad? ¿Sería capaz de romper su promesa? ¿Y si fuera capaz? La sola idea la espantó. “Al fin y al cabo fue capaz de arrancar a Luciana de su vida anterior, de arrebatársela a sus padres, de hundirlos en la angustia y sepultarla a ella en el barro de la prostitución. La descerebró, la convirtió en un animal sin ideas. Le destrozó la vida con mi complicidad.” –se dijo y en ese punto la culpa la ahogó y tuvo que abrir la boca desmesuradamente para enviar aire a sus pulmones mientras el llanto le anegaba los ojos. Aún estaba a tiempo de liberarse respondiéndole no a Emilia y olvidándose para siempre de ella, de la mansión, de Elba, de la sala de juegos, de la celda.
    
    …………….
    
    Emilia se impacientaba cuando había pasado media hora de las once y Graciela no llamaba. Estaba con Elba en su oficina y a esa altura la proxeneta y su ama de llaves comenzaban a dudar sobre cuál sería la respuesta de la esclava.
    
    -Decime la verdad, Elba, ¿creés que hice bien en apurarla o debí esperar un poco más?
    
    -No, señora, hizo bien, la yegua ya está madura para decidirse. El haberle dado un poco más de tiempo no habría cambiado nada.
    
    -Sí, tenés razón. –dijo Emilia como aliviada ante la opinión de su fiel Elba. Trató de ...
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