Fogoso encuentro en una reunión de exalumnos de secundaria
Fecha: 06/06/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: soyAriel, Fuente: CuentoRelatos
... estaba muy agitada.
Hola amor, ¿Como estás?, ¿ya voy por ti?
No, amor, no te preocupes, me llevará Claudia, una amiga.
Había quedado a boca abajo mientras hablaba con mi esposo, Miguel seguía caliente, sentí que se acercó y abrió mis nalgas, empezó a chuparme el culo, se sentía tan rico que tuve que morder mis labios para no gemir, mi esposo seguía hablándome:
¿Y cómo está la reunión?
Bieenn, muyy diveeertida.- expresé en forma entrecortada.
¿Estás bien?, te escucho agitada.
Siiii, sólo que he bailado muuucho, aghhh y tuve que salir afuera para poder hablar- expresé.
Miguel metió un dedo en mi culo y mi marido no terminaba de hablar, mordí una almohada para ahogar mis gemidos.
Sabes amor, me sentí culpable por no haberte acompañado, perdóname- expresó mi marido
Nooo, te apuuures, me estoooy divirtiendo muuucho- dije con mucha dificultad, ahogando mis gritos de placer.
En eso siento que Miguel me toma de la cintura y me pone en cuatro patas, me hace doblar la cintura, y su verga recorre mi rajita, todo mi cuerpo se estremeció, me iba a empalar, mientras seguía hablando por teléfono y no podía hacer nada, mi culo estaba indefenso y tampoco podía colgarle a mi marido.
Tomé el celular y lo puse en altavoz al tiempo que lo alejaba, necesitaba oír que decía y al mismo tiempo evitar que escuchara mis gemidos.
Siguió hablando, disculpándose, de lo que me extrañaba y de cómo se había comportado el bebé, mientras que Miguel dio un golpe de ...
... caderas y de un certero golpe me enterró toda su verga, mordí las sábanas para ahogar mi grito de placer, empezó a embestirme y ya no podía articular palabras, sólo contestaba con monosílabos a mi esposo, ahhh, siiii, siiii.
Dio un golpe de cadera y me la enterró de una sola estocada, no lo esperaba y no pude evitar dar un grito ahogado, mordiendo la almohada, se escuchó también un gemido de Miguel, en el espejo vi como sonreía en forma pícara.
¿Estás bien?, me pareció oir un grito- dijo mi esposo.
Siiii, creo que fue una amiga gritando en la reunión están cantando canciones rancheras, todo bien- mentí.
Miguel seguía empalándome, me sostenía de la cintura y con certeros golpes de cadera me la enterraba hasta el fondo, su pelvis chocaba con mis nalgas y se empezó a escuchar el clap, clap, clap característico, la cama se balanceaba al ritmo de sus embistes.
Que es ese ruido - preguntó mi esposo.
Están aplaudiendo, te dije que están haciendo un concurso de canto.
Lástima, de haber sabido, me gusta cantar, me hubiera divertido mucho, a la próxima no me pierdo la reunión.
Siiii, amor, no te preocupes, en un rato llego.
Siii, ya no tardooo.
Colgué el teléfono y me le quedé mirando a través de un espejo, dejó de empalarme y me sonrió, una sonrisa traviesa y divertida...
Cabrón, casi me cachan- le expresé.
Perdóname es que estás tan rica que no podía dejar de cogerte- respondió, con su sonrisa de oreja a oreja, aquella tan tierna que era imposible no ...