1. Penelope, mi primera vez...


    Fecha: 24/07/2024, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... mis pies, buscó ponerse cómoda y la dejé hacer, entonces sentí su boca, sus labios, su lengua en mi verga, que más decir, solo se dedicó a chupármela muy rico y en segundos estaba erguido nuevamente, todo era demasiado y en un punto solo veía los cabellos de esa mujer, su cabeza subiendo y bajando muy profundo y escuchaba los chasquidos naturales de su boca que succionaba como una aspiradora.
    
    Me sentí venir nuevamente después de unos minutos, solo ahí ella levantó su cabeza para que yo observara su rostro, tan hermosa, me miró fijamente a los ojos, pero yo no podía mantenerle la mirada, es que ella estaba con toda su boca abierta, la lengua afuera y mi glande apoyado en ella, respiré profundo, no podía creer que fuera cierto lo que estaba sucediendo.
    
    Eyaculé con tanta fuerza que ella no pudo contener el disparo y el primer chorro escapó de su boca, marcando a su paso una delgada línea que atravesaba su ojo izquierdo llegando sus cabellos, y solo seguí escupiendo como una fuente de parque, más y más hasta que ella envolvió mi glande entre sus labios y siguió chupando, con su entrecejo fruncido bebió todo lo que quedaba hasta la última gota.
    
    Luego tratando de limpiar su ojo izquierdo empezamos a reírnos, como tontos, es que su rostro, mis piernas, el piso, el sillón, todo había sido impregnado por mis jugos calientes. Penélope se sacó el vestido solo para empezar a limpiar todo en derredor. Mi idea era llevarla al dormitorio, pero ella me detuvo en el camino
    
    - ...
    ... Suficiente! - dijo deteniendo la marcha - debemos ser astutos con esto, no hay que levantar sospechas y guardar nuestro secreto, nadie puede saberlo, no seas 'boca suelta', te tragas tu orgullo de macho y ni a tus amigos le dices una palabra!. No me preocupan tus padres, pero mi marido... no se de lo que sería capaz...
    
    La sola mención de Ordoñez me congeló, y fue la mejor medicina para mantener mi boca cerrada a futuro, solo volví a casa y fui por una ducha, necesité volver a masturbarme bajo la tibieza del agua que corría por mi cuerpo.
    
    Fue mi primera vez, y me transformaría en su amante secreto, las locas fantasías de un joven y una mujer que podría haber sido mi madre, ella era única y por su culpa dejé de mirar a las chicas de mi edad. Me causa gracia recordar que jamás pude dársela por el culo, lo intenté una y otra vez, pero para ella era algo prohibido.
    
    Y un día las cosas se terminaron, llegué del colegio como cada día y la noticia en mi casa era que Penélope había abandonado a su esposo, solo una triste carta de despedida para una relación con final anunciado. Me sentí morir por dentro, no me importó su relación con Ordoñez, hasta pude entender que desapareciera del planeta, pero me dolió que se olvidara de mí, que ni siquiera me adelantara algo, o e dejara una carta, nada, nada de nada y en ese momento, en ese momento que sentí mi corazón atorado en la garganta y que tuve que desviar mi mirada para que nadie notara mis ojos llorosos, en ese momento comprendí que ...
«12...4567»