Sobre ruedas (capítulo once)
Fecha: 01/09/2024,
Categorías:
Gays
Autor: osazo21, Fuente: CuentoRelatos
... al tipo. - No sabes lo rico que tiene el culo…
-¡Oye, yo no estoy en esto! Yo no soy bujarrón… - me dio risa aquella respuesta tan típica, porque si no era bujarrón qué hacía dándome de mamar.
-Yo tampoco, pero éste es maricón y le gusta la pinga de los machos.- agregó Williams con ese tono tan conocido.
-Ya lo veo..., maricón tragón de pinga.- dijo mientras me daba unas cachetadas suaves en la cara.
-¿Si quieres te dejo que lo singues un rato? - le propuso William.
-Yo nunca me he singado a un maricón.
-Pero le has dado de mamar bien… como si antes lo hubieras hecho.
-Nunca, es la primera vez…
-¿Y te gusta como mama esta maricona? - William seguía hablando y signándome como si nada.
-¡Cojones, mama rico! ¡Mama mejor que mi mujer!- dijo mientras me empujaba por la nuca para que me tragara su pinga - Se la traga toda sin chistar, con las jevas que he estado, sólo la cabeza y este, hasta el tronco y lo goza.
-Ya te lo dije, es maricón y el mejor…
-Se ve, vi que ni chistó cuando se la clavaste…
-Es maricón de culo… y de boca…
-Bueno, cuando termines, me dejas darle por culo… - aceptó el tipo.
-¡Mira, chico, ven pa´cá!- le dijo William- ¡Ven y mira cómo lo tengo clavado y cómo hay que darle pinga! ¡Ven y nos turnamos!
William había logrado lo que quería y que tan bien se le daba, embaucar a la gente en sus líos. El tipo sacó su pinga y se acercó por detrás, sentí que tocaba con su mano mi culo y la pinga de William.
-¡Cojones, de ...
... verdad que tiene aguante este maricón porque tu pingón es de los grandes! - dijo asombrado.
William sacó si pinga y le dio paso al tipo que metió rápido su pinga sin siquiera saber que podía gozar más si lo hacía lento. Comprobé que era cierto, no sabía singar, porque tenía esa idea de que a los maricones hay que singarlos duro, que mientras más duro, mejor, más macho era él. Se vino en un minuto y sacó su pinga rápido en lugar de seguir, William ocupó su lugar enseguida y yo volví a sentirme cómodo sabiendo que William me daría placer. El tipo se apartó algo, se pasaba la mano por la pinga y la olía.
-¡De pinga, yo pensaba que me dejaría la pinga cagada y me la ha dejado limpia! - dijo sorprendido.
-¡Oye, te lo he dicho… aquí hay un culo limpio pa´singar y mejor que un chocho!
William empezó a singarme para venirse, con más ritmo que antes.
-¡Mira, métele la pinga en la boca que le voy a dar duro para venirme pa´que no grite el muy maricón!
Era quizá la contraseña de que debería empezar a quejarme o gemir, no pude dar ni dos gemidos porque ya tenía la pinga a medio parar en la boca. Gemía como podía, trataba de que me salieran los gemidos para seguirle la corriente a William que quería inmiscuir más al tipo. Cuando William se vino y sacó su pinga, me dijo.
-¡Quédate así, mami! Tú ven para que veas cómo le hemos dejado el culo. - cuando el tipo estuvo allí, William encendió la fosforera para alumbrar, yo intenté de dosificar la salida del semen haciendo ...