1. Morir de amor


    Fecha: 03/11/2024, Categorías: Erotismo y Amor Autor: Chicles, Fuente: CuentoRelatos

    ... su hijo Leo que se fue deteriorando conforme Leo entraba en la adolescencia. Ya se lo había vaticinado Leonardo cuando le pidió que, al divorciarse, su hijo se quedara con él. “Esas son patrañas de los psicólogos machistas”, respondió ella. Pero a los tres años, la realidad la golpeó brutalmente y no tuvo más inspiración que correrlo de su casa un par de veces, obligándolo a refugiarse con sus abuelos maternos la primera vez y con los paternos en la segunda. En ambas ocasiones, ella fue a pedirle a su hijo que regresara a casa y el niño aceptó regresar.
    
    Leonardo había disfrutado de la voluptuosidad de Verónica y la amaba. Pero también admiró a José quien dejó de beber, aunque seguía fumando mucho, y cambió radicalmente el trato con sus hijos y su exesposa, consiguió un nuevo empleo y escaló rápidamente hacia puestos de mayor responsabilidad con mejores ingresos. Sin embargo, José seguía molesto con Leonardo, a quien al principio había culpado de todos sus males, pero ahora ya sólo eran celos y, si bien no era amable en el trato, si era respetuoso con él. José le pedía frecuentemente a Verónica que regresaran y ella se negaba. Leonardo le pidió a Verónica que se casaran, ya tenían año y medio viviendo juntos, y ella le dijo “Por ahora no, primero debemos buscar una casa más grande donde quepamos los seis. Después de eso, ya veremos…”
    
    Leonardo no entendía por qué Verónica le daba largas a la propuesta de matrimonio y creyó que ella lo hacía porque veía en José una ...
    ... transformación para bien y quizá regresar con él tendría ventajas para los hijos. “¿Por qué no vuelves con José?, él ya es como tú querías que fuera”, le preguntó una vez a Verónica y ella contestó molesta en forma categórica: “Si alguien le dice a su pareja que ya terminó todo, ésta no debe suplicar por lo contrario.”
    
    Verónica y Leonardo habían planeado ir a la zona del Cañón del Sumidero en las vacaciones de verano, pero, Victoria había resuelto el problema legal donde ella aceptaba que la custodia de su hijo Leonardo pasara a ser del papá. Ello requería de un tiempo de adaptación entre Leonardo y su hijo e hizo las modificaciones sin consultarlo con Verónica, sólo le informó de lo que planeaba hacer: Remodeló su departamento y previó que esas vacaciones las hicieran padre e hijo solos. A los pocos días de que ya vivían los dos en el departamento, aunque a veces iban a dormir a la casa de Verónica, o ella iba a dormir con ellos. Una noche llegó ella y con los ojos húmedos se dirigió a Leonardo.
    
    –Sólo he venido para decirte que lo nuestro ha terminado –dice por toda explicación, sin concluir su entrada.
    
    –Pero... ¿Qué te ocurre? –inquiere alarmado al tomarla de las manos cambiando el semblante de su rostro por otro de sorpresa y compungido.
    
    –No pasa nada. Ya no podemos seguir con nuestra relación. Eso es todo –musita dejándose abrazar.
    
    Le quita el bolso y lo pone sobre una mesa; la lleva hacia el sofá y, sin separarse, se sientan. Ella llora recargada en el pecho de ...
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