Samantha: Corrupción y perversión de una casada (lll) (1/2)
Fecha: 21/11/2024,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: JCerva, Fuente: CuentoRelatos
... de asesina y regresaba su mirada de solo preocupación y ternura, sabía que ya estaba del otro lado.
-¿En verdad fue por eso mi cielo?- la mujer poniendo su mano en la mejilla de su hijo y mirándolo a los ojos, ella aun con sus ojos vidriosos le preguntaba.
-En verdad, mami. Te lo juro por la Virgencita de Guadalupe- el chiquillo casi hincándose le juraba a su madre que todo lo que salía de su boca era verdad.
La madre aún tenía ciertas dudas, conocía a su hijo como la palma de la mano y sabía que el prefería evadir cualquier deporte de contacto y que requiriera el correr. Pero al mirar lo sucio que se encontraba su uniforme, comenzaba a creer que lo que decía su hijo era cierto. Aparte Daniel no era un niño que mintiera. Era alguien que, a su corta edad, buscaba la justicia, aunque a veces esta lo afectara. Eso lo había aprendido de su padre. Así que, quitándose esas dudas, decidió confiar en su vástago.
-Pero mira nada más como te quedo el ojo, tontito jijiji- Samantha con sus ojos rojos por las lágrimas que había soltado, comenzaba a reír al ver que todo se había tratado de una travesura de su hijo. -Ven, vamos adentro para limpiarte y ponerte pomada en el ojo para que se te desinflame. ¿Ningún maestro o prefecto te curo?- la mujer poniendo su mano en la espalda de su hijo lo encaminaba mientras hablaban.
-No, mami. El que me ayudo y me puso alcohol fue el conserje, Don Goyo. La verdad es que es una buena persona- Daniel volteando a mirar a su madre ...
... mientras caminaban le contaba lo bien que se había portado aquel hombre con él.
-Qué bueno, mi cielo. Mañana que vaya a la escuela hablare muy seriamente con tu prefecta para decirle que este más atenta a los alumnos. Y también visitare a Don Goyo para agradecerle que te hubiera curado- sin dejar de caminar y con una sonrisa amigable, le respondía a su hijo.
Después de varios minutos en los que la madre atendía a su hijo de su ojo y otros raspones que le vio en algunas otras partes del cuerpo, que intuía se debían a lo intenso que fue el juego. Terminaba por casi bañarlo en pomada, el adolescente solo se limitaba a soportar como los campeones los tocamientos que le hacia su madre por diferentes partes de su cuerpo. Y es que, en algunas partes, principalmente su torso, cualquier ligero rozón, lo sentía como si le estuvieran apretando con mucha fuerza por lo sensible que tenía ahí. Sabía que, si se quejaba, podría alertar de nueva cuenta a su mamá y dada la hora, ya no tardaría en llegar su papá. Sabía que no podría soportar un interrogatorio con ambos a la vez. Así que solo le quedaba aguantar a que su madre acabara con ese martirio que le estaba resultando.
Samantha por fin termino de untarle la pomada y justo en ese momento escucharon que abrieron la puerta principal. Roberto extrañado vio que hoy no lo recibieron como era costumbre. Así que dejando su maletín y saco en uno de los sillones, subió las escaleras preguntando por ambos hasta que escucho la voz de su mujer que ...