1. ¡Hijo, me tienes harta!


    Fecha: 11/12/2024, Categorías: Incesto Autor: LilithDuran, Fuente: CuentoRelatos

    ... —murmuró mientras tocaba los papeles de encima de la mesa para apartarlos un poco.
    
    Se sentó delante del ordenador, moviendo el ratón por la única parte del escritorio sin libros y sacando el teclado de la parte de abajo por si lo necesitase. La pantalla se encendió, comenzado a navegar con calma por las carpetas que encontraba. La gran mayoría eran juegos que, obviamente, María no conocía.
    
    —Seguro que de matar… Este también… —viendo un rifle en el icono, no pudo evadir un comentario sarcástico— Toda la pinta de que es muy didáctico, sí…
    
    Dejando a un lado esa parte de la pantalla, bajó el ratón para buscar en internet. Por supuesto, ese ordenador solo lo utilizaba su hijo, ella apenas se metía alguna que otra vez si quería imprimir una cosa y Manu… dudaba de que supiera encenderlo.
    
    Las páginas que tenía de inicio tampoco decían nada, alguna de periódicos deportivos, la de la universidad donde miraba las notas y redes sociales, nada donde rascar. María meditó si sería buena idea abrir el historial de navegación, se imaginaba lo que podía encontrarse, pero también sacaría en claro los gustos de su hijo.
    
    Pulsó el ratón y ante ella apareció una larga lista de páginas web. Era evidente lo que veía, su hijo no ponía pestañas ocultas porque nadie jamás le había espiado como ahora lo hacía su madre. Si lo hubiera sabido, se hubiera cuidado un poco.
    
    El porno que consumía Javi parecía desmedido, al menos para una madre en mitad de la cuarentena que no estaba puesta ...
    ... en ello. Si las demás madres hablasen del mismo tema o vieran lo que había dentro de los móviles u ordenadores de sus hijos, todas llegarían a la conclusión, que pese a ser mucho… era lo normal entre los jóvenes.
    
    Bajó y bajó por la gran lista, viendo que también alternaba el porno con otras búsquedas, viendo stremers en directo y videos de YouTube. Sin embargo, se sorprendió de la gran cantidad de páginas web que visitaba…
    
    —¡Normal que me deje sin papel…! —dijo en voz baja sacando una pequeña sonrisa.
    
    De pronto, una curiosidad nació en ella, algo que ni siquiera fue un pensamiento, únicamente una inquietud a la que todavía ni siquiera le había dado forma. El dedo que tenía encima del ratón pulsó de manera impulsiva, dándole “sin querer” a una de las páginas para adultos y, en un instante, se puso en la pantalla.
    
    Antes de esa milésima de segundo en la que la página se cargó, María ya quería buscar el icono de la X para deshacerse de ella. Pero cuando sonó el primer gemido de un video que estaba a la mitad, sus manos soltaron el ratón como si la hubiera empezado a quemar, para dirigirse tan rápidas como torpes a bajar el volumen.
    
    Quedó con los dedos pétreos en la pequeña ruleta que encontró en uno de los dos altavoces, con la mirada fija y casi hipnotizada en la mujer que cabalgaba como posesa a un hombre tumbado en el suelo. Le hizo gracia la estampa, porque la mujer, con unos pechos realmente grandes, vestía un pequeño disfraz de policía… o lo que quedaba de ...
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