El estímulo auditivo de su compañera de piso
Fecha: 12/02/2025,
Categorías:
Lesbianas
Autor: MathewDream, Fuente: CuentoRelatos
... para estimular el clítoris en el mismo movimiento. Así, entraban y salía de su interior acompañando la penetración con un delicioso y placentero roce, una agradable presión o un urgente deslizar que fue cada vez a más y sin ninguna intención de detenerse pasara lo que pasara.
La oyente gemía y se descontrolaba sin remedio al ser partícipe de una masturbación mutua con su exuberante y admirada compañera de piso. Su cuerpo temblaba en cada latigazo de placer que recibía desde los epicentros de su clítoris y su mente. Y justo en ese momento calculado y esperado por un profundo conocimiento de la obra, la grabación se tornó más intensa y explícita.
Gruñidos, ronroneos, gritos de placer y choques húmedos de un cuerpo contra el sexo de Ana, que Lorena imaginó que eran sus dedos. Y después, un sensual, largo y sonoro orgasmo que le estremeció y a la vez anunció que se fuera reservando para que ella le tuviera que ofrecer después el suyo como guinda del pastel.
– Prepárate porque ahora que tú ya has conseguido que me corra, yo te lo voy a comer todo… Ya verás cómo te gusta mi boquita…
– Umm, así, disfrútalo mucho. – Seguía contando el audio acompañado de sonidos de lametones y chupeteos, mojados, babosos y juguetones.
Y mientras, Lorena se revolcaba en la cama sin importarle que el cable de los auriculares se enroscara en su cuerpo apretándole como una serpiente y moviera a la vez una de sus tetas, buscando la mejor postura para frotarse de forma acelerada el ...
... clítoris, arqueando su espalda, abriendo su boca de par en par y gritando por las oleadas de placer que le venían al imaginar cómo su amiga se la comía sin compasión.
– Así, dámelo todo, córrete en mi boca. Aquí
No pudo evitar imaginársela perdida entre sus piernas, sedienta, con sus habilidosos labios degustándola, señalándole donde quería notar el sabor de su placer.
Además, los deseos de Ana eran órdenes para Lorena, y había que sincronizar milimétricamente el momento.
Así, la chica puso todo su empeño y usó sus mejores técnicas, colocándose boca arriba y levantado las caderas para penetrarse y a la vez estimularse el clítoris con ambas manos de forma forzada y apresurada tratando de explotar en pocos segundos.
– Umm si… dámelo… córrete, que ya tengo ganas de sentirlo en mi lengua…
Lo notaba a punto.
– Córrete para mí… igual que yo me corrí para ti. Vamos.
La lengua de Ana se le apareció en imágenes deslizándose por todo su sexo, degustando cada milímetro y deteniéndose especialmente en movimientos que hicieran vibrar y sentirse muy bien atendido a su hinchado clítoris. Aquello unido a los sonoros lametones y chapoteos que salían por los auriculares la llevó por fin al éxtasis. Y se corrió sin ningún tipo de contención en unos últimos gritos de placer, que consiguió que fueran paralelos y se mezclaran con el sonido de la mujer relamiéndose y recreándose en paladear sus jugos. Consiguiendo así un orgasmo que se alargó durante muchos segundos, con ...