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Ángela: Una joven fitness dominada por su puta interior
Fecha: 22/02/2025, Categorías: Dominación / BDSM Autor: CarlosDom, Fuente: CuentoRelatos
... no te quedas atrás. -replica ella palpándole el bíceps. —Gracias, también me he esforzado mucho. Ya que regaste mi agua sin querer ¿qué te parece si me acompañas a casa por más y de paso te invito un jugo? nos tardaremos un segundo. —Dale, será un placer. Durante el pequeño trayecto, se enzarzan en una conversación interminable; hablan de vacuidades, se cuentan quienes son, sus oficios y aficiones, la cotidianidad de sus vidas. Hasta que finalmente, dos horas después, Ángela decide regresar a casa. El joven, mira atentamente el vaivén de sus caderas mientras se aleja. —Vaya zorrita -masculla para sí mismo. Al día siguiente, Orlando decide escribirle para invitarla de juerga al pueblo y ella acepta gustosa, sin embargo, por cosas del destino su encuentro se tiene que aplazar; pues la abuela paterna de ella ha sufrido una recaída a consecuencia de su insuficiencia cardiaca. El fin de semana culmina y ambos regresan a sus rutinas en Bogotá. Las conversaciones vía WhatsApp entre ellos se hacen cada vez mas y mas frecuentes. Ángela lo provoca, es insinuante y le envía selfis sugerentes en ropa interior, con la excusa de pedir su opinión sobre los resultados de su entrenamiento. Hasta que un día todo cambia y Orlando pasa de las incitaciones sutiles a los comentarios directos; Ángela le ha enviado una foto de espaldas subiendo escaleras; en la que luce una minifalda de cuero negro junto a unas medias de malla blancas, que remarcan su culo de manera apoteósica ...
... y junto a ello una pregunta: Ángela: ¿Crees que debería trabajar más mis glúteos? Orlando: Ese culo de zorra incita a muchas cosas. Ángela, que había tomado aquello de las fotos como un simple juego, se sorprende al leer esa respuesta; estaba siendo muy directo, nadie le había dicho algo así fuera de la cama, pero le gusta; el que la llame zorra, esa transgresión la excita. Lee la respuesta un par de veces y su sexo responde, siente cosquilleo por toda su entrepierna, pero no sabe qué responder. Decide enviarle otra foto a ver qué ocurre: esta vez, elige una en la que lleva un diminuto hilo rojo que se pierde entre sus nalgas. Orlando: Perra… seguro estas deseosa de que te diga más guarradas para dedearte como puta. Al leer en voz alta aquellas palabras, los fluidos emanan de su sexo y sus pezones se endurecen. Su mano, como si tuviera voluntad propia, se dirige a su entrepierna para empezar a frotar el clítoris y los labios. Esa falta de respeto y esa tónica imponente la están poniendo a mil. Ángela: Nadie me ha hablado así… Orlando: Y ¿qué? Ángela: me gusta, me calienta… Le envía una foto de sus tetas apretadas bajo un top blanco que apenas deja algo a la imaginación. Orlando: Eres una puta arrecha, una zorra hambrienta de verga. Ángela se frota el clítoris como si no hubiese un mañana, su vagina está tan babosa como nunca; pasó de provocar a estar provocada. Ángela: Orlando... que rico todo lo que me dices... Orlando: Dilo tú, ...