Una apuesta y un deseo no confesado
Fecha: 15/07/2025,
Categorías:
Infidelidad
Autor: vule69, Fuente: CuentoRelatos
... septiembre ya era habitual que a la hora de la junta fuéramos 5 y no 4 en nuestras tertulias las que por cierto enriqueció con su infinita erudición tomando en cuenta sus nóveles 36 confesados años y su hermosa cara de niña buena.
Desde el principio para Daniela fui el foco de las bromas con la profe. Acerca de lo mucho que me miraba y en cómo lo hacía y sobre todo en la supuesta diferencia que había entre sus sonrisas hacia los demás y las dirigidas a mí.
A pesar de replicarle todo el tiempo sus bromas, argumentando que solo era su imaginación, comencé a notar que mi amiga no estaba del todo equivocada (o eso creí ver) y sus comentarios lejos de molestarme solo contribuyeron a sumar coraje para de una vez por todas, invitarla a salir.
Y, un par de días después, lo hice. El último martes de septiembre se materializó nuestra primera cita. Resultó ser (a pesar de lo mucho que nos reímos), según yo, un completo desastre, pues nada salió como lo había planeado. Sin embargo, Fresia, al poco me confesaría que nunca se había divertido tanto en una cita en su vida.
Quizás por ello, esa misma noche quedamos en volver a vernos el viernes de esa misma semana en lo que fue, oficialmente, la segunda cita. Si durante la primera hubo una atmósfera cordial, amistosa y llena de ganas de escuchar y empatía, la segunda tuvo, podría decirse, dos etapas muy marcadas.
Al principio todo fluyó tal cual había sido el martes pasado. Las conversaciones fueron espontáneas y escuchadas, ...
... pero -casi al final- tomó un cariz distinto, pues y no sé quien lo hizo primero, la cuestión es que ambos comenzamos a mirarnos con un evidente y contenido deseo, empero ni un beso nos dimos aquella vez.
La tercera cita no se llevó a cabo sino hasta un par de días después del día de la raza, mediaba octubre. El sol desaparecía en el horizonte, pintando las nubes de vívidos anaranjados, rojos y violetas cuando el teléfono me sacó de mis cavilaciones. Era ella. Me pedía estar en su Depto. en una hora. Luego de preguntarle muchas veces si algo malo pasaba, contestándome pacientemente a todas y cada una de ellas negativamente, acepté.
II
Ha sido por lejos la cita más larga en toda mi vida. Llegué a sus aposentos un jueves en la noche, tipo 10 pm y entre mucho romance, consideración, tierna exploración y erotismo, volvimos al mundo real recién el siguiente lunes. Recuerdo que esa noche…
Su puerta se abrió en cuanto sonó el timbre. Solo pude ver de ella su cabeza con el pelo suelto (como casi nunca) y un pie desnudo. –Pasa-, señaló en un ronco tono de voz. En el interior predominaba la oscuridad. La excepción era una tenue luz proveniente de una pequeña lámpara ubicada a la derecha de la puerta, detrás de un bello sitial.
Se escuchaba de fondo, en un moderado volumen, música anglosajona de los 80. Unos cuantos pasos tras atravesar la puerta detuve mi andar. Escuché a mis espaldas el sonido del pestillo asegurando la entrada, volteé y pude ver primero su silueta y ...