1. Las bragas azules de Andrea Celeste: Mi guía de turista


    Fecha: 27/08/2025, Categorías: Anal Autor: Tonyzena67, Fuente: CuentoRelatos

    ... de varios jadeos ella chocaba su concha contra mis huevos y luego gritando y clamando a Dios, decía que se corría. No paré mi embestida que quizá había durado un par de minutos y me corrí en su hueco vaginal y podía sentir esa vibración de su vagina contrayéndose todavía reaccionando a su orgasmo. En menos de diez minutos nos habíamos corrido ambos. Cuando nos fuimos a limpiar de la primera corrida ella me decía:
    
    -¡Tienes una pija grande! No te la pude mirar antes, pero sí que la sentí cuando la metías.
    
    -¿Te lastimé?
    
    -Me dolió cuando llegó al fondo, pero luego sentí el placer de un orgasmo que me comenzó en el clítoris y terminó como un orgasmo vaginal. No es común que se sienta así.
    
    -¿Pero si te gustó?
    
    -¡Me encantó! -me dijo.
    
    En ese momento supe que Andrea Celeste era abierta para hablar de su sexualidad y eso me dio la confianza para hablar de lo que para mi ya era un fetiche: el sexo anal. Ella me contó que su primera experiencia sexual había sido anal y que con su marido tenía sexo anal por lo menos una vez al mes, pero me advirtió que el paquete de su marido no era tan grande como el mío, pero que estaba dispuesta a intentarlo. Previo a invadirle ese precioso culo con los 22 centímetros de mi falo, ella me dio una mamada increíble que, si no hubiese acabado minutos antes, me hubiera hecho acabar en minutos. Andrea tenía una técnica deliciosa para mamar verga en lo que incluía un sacrificio de prácticamente metérsela en el esófago que parecía se ...
    ... ahogaba.
    
    Hay veces que verdaderamente me admiran algunas chicas. Chicas petit que se dejan enterrar un buen palo y unas que no aguantan para nada. He tenido experiencias con chicas de glúteos grandes y de buena altura que me han pedido desista en penetrarles el culo pues no aguantan y hubo una que literalmente no la pude penetrar. Su esfínter se resistió y apenas entraba lo expulsaba y la chica se quejaba del dolor. Y hay otras como Andrea Celeste, que uno no se puede imaginar follándolas salvajemente el culo, pues aparentan ser delicadas y que no soportaran una buena embestida por el trasero. La verdad que sexualmente todos somos diferentes.
    
    Después de la mamada, la misma Andrea tomo posición de perrito y me dejó a disposición su culito. Desde ese ángulo en cuatro me dejaba ver esos dos ricos orificios. Podía ver que estaba excitada de haberme mamado la pija, como le decía ella, pues su conchita estaba mojada y se escurrían jugos vaginales. Yo me hinqué para una vez más chuparle esa conchita rosadita totalmente depilada y luego subí a chuparle el ojete. Ella me dijo: ¡Me vas a volver loca con lo que haces! -Para qué me lo dijo, pues aquella faena de comerle el culo a esta chica me llevó unos quince minutos donde Andrea gemía de placer y me contraminaba el culo para sentir la presión de mi lengua en su ojete. Antes de penetrarle su ojete, le metí la verga en su reducida conchita y llenarme de sus jugos vaginales y hacer más fácil la penetración anal.
    
    Ella me había hablado de ...