HORMIGONANDO 3
Fecha: 24/09/2023,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... hija del capataz. Romualdo la viene cogiendo desde chiquita. Creo que la mujer lo sabe, pero se hace la gil, para vivir bien…, y quedarse en la ciudad…, lo que le permite buscar tipos con los que coger. Según dicen, tiene tres o cuatro por semana. ¡Todos contentos!
-Sin duda…, se da todos los gustos… - Claudia, en silencio, apretándose los labios, había tenido dos o tres orgasmos. Me abraza y me besa constantemente. ¡Súper cariñosa!
-Hoy vos sos el invitado especial. – Amalia acaricia la espalda de Claudia. Le da ternura ver como la nena goza con la cogida. - Te va a decir que podés dormir la siesta. Virginia va a ir a dormir con vos…, seguro.
-Y yo también… - Claudia manifestaba sus deseos.
-Si, por supuesto. Te la meteré todas las veces que quieras… - Eso no es gratis. - ¡Ay ay ay, nena! ¡Me hacés acabar! – Deseo “homenajearla”.
-¡Si, dame! – Las dos se arrodillaron a la altura de mi pija. Los cuatro o cinco chorros de semen se repartieron entre las dos bocas. Ambas tragaron gozosas…
Nos relajamos algunos minutos y nos recompusimos la vestimenta. Cuando nos pareció estar “en orden” nos pusimos en marcha hacia la chacra de Romualdo. En cuanto llegué me presentaron a los presentes. Conté siete u ocho mujeres y cuatro hombres, además de nosotros. Todos mostraron – aparentemente -, interés en conocerme, como “el ingeniero de la obra”, como si fuera el único. No averigüé mucho, pero Amalia me anotició…: fulana, fulana y fulana, son las mujeres de tal y cual, ...
... funcionarios o empresarios importantes de la zona. Las otras minas eran directamente putas finas, invitadas exprofeso para “entretener” a los hombres. Todas y todos andan entre 40 y 50 años, o sea veteranos experimentados…, con gran cantidad de cogidas en el currículo…
Amalia también me dijo, en algún momento, que varias fulanas le preguntaron si me podían tener hoy…
-¡Noooo! - ¡Me espanté!
-Les dije que se comuniquen con vos y arreglaran.
-¡Espero que no jodan!
-¿Te molestan? ¡Están buenas! ¡Y deben coger muy bien!
-No necesito nada. Te tengo a vos, a Dalia, a Claudia. ¿Para qué quiero más?
-¡Sos un amor total! – Ambas me llenaron de besos.
Estábamos sentados, comiendo, en una mesa para 20 comensales. La gente que estaba cerca, Romualdo, Virginia, Dalia, y un par de parejas, nos miraron asombrados… y sonrientes. Sin duda supondrán que yo sería un semental imbatible. ¡Jajaja! ¡Qué equivocados!
Luego del opíparo almuerzo, ocurrió lo que Amalia previó. Virginia vino a mi lado y me invitó a “dormir la siesta”. Le dije que si, siempre que Claudia viniera con nosotros. Estuvo totalmente de acuerdo, incluso con satisfacción. Dalia y Amalia se fueron a dormir con Romualdo. Sin duda yo dormí, luego de una magnífica mamada por parte de Virginia y Claudia. Cuando desperté, una hora, más o menos, fui al baño, de ingreso directo desde el dormitorio, a alivianar las tripas. Me duché y me higienicé prolijamente. Al volver a la habitación, Virginia y la nena estaban listas para ir al ...