MÚLTIPLES JUEGOS - Relatos Eróticos

MÚLTIPLES JUEGOS

... el culo bien parado. 
Eso fue genial. Se la metí por el culo a Karina. Me la tomó con toda la mano para colocársela en el hoyo. Besaba a la mamá mientras entraba. Por momentos, cambié a la concha de Lorena. Un poquito a cada una. Cuando la tenía dentro de una, le metía los dedos a la otra.
-¡Ay! ¡Ay! ¡Papitoooo! ¡Acabooo! – Karina fue rápido.
-¡Si! ¡Si! ¡Yo también! – Ambas llegaron a un nuevo orgasmo.
-Quédense así… - Y me agaché a chupar, primero la concha de Karina, que tenía más a mano, luego la de Lorena.
-¡Qué desayuno! ¿No? ¡Jajaja! - Lorena sí que tenía ocurrencias. ¡Además de hermosísima concha, culo y tetas! 
Cuando se levantó Karina, fui al culo de la madre. ¡Hasta las tripas!
-¡Ay loco! ¡Me muero! 
Karina se inclinó a chupar la concha de la mamá. No quedaba mucho jugo, pero no le preocupaba. Los gemidos de ambas demuestran que gozan…
-Papito, nos tenés que llevar a la estación… - Lorena siempre está atenta.
-Claro, vamos a bañarnos. Me levanté. Es el momento de terminar…, aunque me quedé con ganas…
-¡Jajaja! ¡Sino tendremos demasiado olor a sexo!
Fuimos los tres a la ducha. Le acaricié los culos y conchas, mientras las enjabonaba. Ellas se dedican a mi pija todavía con las ganas intactas. Las pastillitas son geniales. ¡Y mi corazón aguanta!
-¡Abran la boca! – No hizo falta más indicación. Ambas ...

... arrodilladas bajo la ducha y mi pija soltando semen a sus boquitas. 
-¿Sabés Dani, mi amor? Me gustó mucho hacerlo con Karina. – Lorena está entusiasmada. - Nunca me hubiera imaginado… ¡qué tuviera tan rica conchita! ¡Con razón te entusiasmó tanto “enseñarle física”! 
-¡Si mamita! ¡A mí también me gusta mucho, muchísimo! – Karina compartía su opinión. – Fue maravilloso que Dani nos alentara a ello. Pero… ¿sabés? Creo que junto a Dani es más rico… Me gusta mucho tu conchita mamá…, pero… alternando con la pija de Dani… ¡es más lindo todavía! No solamente tu juguito es rico… ¡la cremita de Dani es riquísima! ¡Me gusta tanto tragarla!
-¡Jajaja! ¡Hicieron escuela tus cochinadas! – Lorena se burlaba de sí misma.
-¿Viste que no soy sólo yo? ¡Ustedes no se privan de nada!
-Bueno…, todo es más rico…, pero la próxima nos ocuparemos de no estar fértiles, así nos acabás dentro a ambas. – Lorena decidía siempre. – Dentro de la concha, digo. ¡En el culo es otra cosa!
-¿Por qué no tomamos pastillas anticonceptivas, mami? – A Karina le intrigaba…, ¿o quería que en toda cogida le acabe en la concha?
-Es que…, bueno…, a mí me hinchan…, un poco… No digo que me molestan, sino que me siento hinchada. Tal vez a vos no… Bueno luego probaremos.
-¡Si! ¡Ojala! De todas maneras, me gusta metérselas a ambas, en todos los agujeros. – Yo estaba de acuerdo.