1. La granja: ¿Premio o castigo? (4) Dos hacen el amor


    Fecha: 15/11/2018, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Crom, Fuente: CuentoRelatos

    ... metía y la sacaba de mi cavidad bucal y el no perdía detalle, por ratos me acariciaba la cara o jugaba con mi pelo, pase a sus bolas y fue la misma atención, con cariño y sin hacerla algún daño besaba sus testículos, y los metía a mi boca.
    
    Erick me detuvo en seco para liberarse por completo de su pantalón y quedar desnudo, intente hacer lo mismo con el mío pero él no me dejo, me acostó a la cama de espaldas mientras que el encima mío, bajaba con sus labios recorriendo desde mi cuello hasta mi espalda desnuda parando solo al encontrar de barrera a mi pantalón que aun tenia puesto.
    
    Suavemente bajo el mismo, mi pantalón, aparecieron las primeras curvas de mis nalgas, las cuales el besaba una por una, mientras más pantalón el bajaba, mas iba besando mis nalgas, hasta que una vez con el pantalón fuera, pudo tener mi trasero para él solo, los tocaba y las apretaba ligeramente evitando hacerme algún daño.
    
    Con la cara hundida entre mis redondos y firmes glúteos Erick besaba cada rincón, no agresivo, no fuerte, sino al igual que la mamada que le había dado suave y tiernamente, podía sentir su lengua en mi ano, dilatándolo, yo gemía muy bajo para evitar que alguien pueda escuchar, pasaba una y otra vez la lengua por todo el canal anal.
    
    Con cuidado se fue acostando en mí encima, su pecho peludo hacia contacto con mi espalda y me erizaba la piel, me volvía a dar tiernos besos por todo mi cuello pero esta vez incluidas mis orejas, toda herramienta erecta estaba colocada ...
    ... entre mis nalgas, así como un hot dog en un pan largo.
    
    Se frotaba contra mí, la sensación era única, hasta que por fin su boca emitió sonido:
    
    Estas listo mi amor – dijo suavemente a mi oído.
    
    Si, amor – dije esperando ansioso.
    
    Estaba tan extasiado con la situación que después de aquellas palabras lo único que sentí era como su pene entraba muy despacio por mi recto, sentía un poco de dolor a pesar de la consideración de Erick, unimos nuestras manos mientras era penetrado, mi primo me besaba mientras su verga se iba abriendo paso, es así como al poco tiempo después ya la sentía toda adentro.
    
    Amor sientes como late mi corazón, late de esa manera por todo el amor inmenso que siento por ti – dijo Erick casi susurrándome al oído
    
    Yo también te amo Erick, y a mi tío y Cris también, a todos ustedes los amo – dije con la voz entrecortada pues se me hacía difícil hablar por el peso de su cuerpo.
    
    Lo se bebe, se cuánto amor nos tienes, eres un buen chico, tan noble y sincero, como no quererte – dijo
    
    Di un leve gemido.
    
    No me importa si eres un hombre, me encanta este momento contigo, siento que estoy haciendo el amor por primera vez después de bastante tiempo – dijo meneando un poco su pelvis.
    
    Erick seguía completamente echado sobre mí, mientras que con su pelvis se encargaba de la penetración, se movía de arriba hacia abajo, y la cama daba unos ligeros golpes a la pared, era todo tan romántico, nada era agresivo, mientras él seguía en lo suyo, yo no podía evitar ...