ZANJA, ZANJITA, ZANJÓN - Relatos Eróticos

ZANJA, ZANJITA, ZANJÓN

... quedás parado. Yo quiero probar porque me imagino que es lindo sentirte sobre las caderas. Mamita dice que es muy lindo y que vos la hacés gozar mucho cuando te ponés así…
-En realidad, tanto con tu mamá como con vos, tengo la pija siempre al palo…Tengo la pija muy caliente, mi amor, tengo muchas ganas de metértela… siempre…
-Pero…, sino me conocías cuando vine…
-Pero mamita me había dicho como sos y todo lo que sabés hacer…
-¡Jajaja! Claro papito, para eso vine, para coger con vos… Mami dice que es tan rico tenerte adentro que nadie quiere que se la saqués…
-No seas exagerada…
-¡Ya vas a ver! Luego de que me cojás varias veces…, a mi sola…, te voy a traer otras chicas amigas… ¡Vas a ver que ninguna va querer dejar de coger con vos!
-Dale, ponete en cuatro. – La embarduné de saliva, meta lengua y lengua, lo más adentro posible. Lo tiene tan bien dilatado que no hace falta más. Me monté sobre las caderas. - ¿Te peso así?
-Por ahora no, dale seguí. – Se acomodó las piernas y brazos para aguantar. De cualquier manera, no voy a descargar todo el peso sobre ella.
	Apoyé el glande en el hoyito y empuje suavemente.
-¡Qué lindo! ¡Cómo me abrís el culito! ¡Tan rico! – Patricia besaba las sábanas. - ¿Por qué es tan rica tu pija, papito? ¡Me gusta tanto!
	La nena acomodó el culo para que la penetración fuera sencilla. Lo tiene suficientemente dilatado que horadarla no ofrece dificultad.
-Es maravillosa, papito. Me entra tan bien en la conchita, en el culito, en la boca… ¡Es tan rico! ¡Todo será siempre así, papito!