Mi hermanito - Relatos Eróticos

Mi hermanito

... que llevábamos ¡cuatro horas! sin parar de follar y Javi todavía tenía la polla levantada y en pie de guerra. 
—Hermanito, no puedo más. Si quieres, luego te haré una paja, pero me has destrozado. Espero que esto se repita aunque me haga replantear mi lesbianismo. 
—Oh, Sandra, gracias por lo que has hecho. Ha sido fantástico. ¿En serio que podremos repetir? 
—Por supuesto, Javi. Esa polla me encontrará dispuesta siempre que quiera. 
—¿Y de verdad podré follarme a tu amiga de las coletas? 
—Ja, ja, ja… 
FIN