DESPACITO Y SIN APURO
Fecha: 18/04/2025,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... boquita mi amor…, quiero que me la chupés…
-¿Si? ¿Me la metés en la boca?
-Claro… Como yo te chupo la conchita y me tomo todos tus juguitos…
-¡Sííí! ¡Me gusta mucho eso!
-Yo te voy a dar mi pija… para que hagás lo mismo…
-Si, dale…, nunca lo hice…, pero si vos decís que es rico…, estoy segura que lo es… ¡Todo con vos es rico! – Giuseppina abrió bien la boca, sonriendo y mirándome a los ojos. - ¡Hacé cómo te gusta!
¡Así lo hice! Se la metí…
-¡Chupá como si fuera un palito helado. Tené cuidado con los dientes…, pásame la lengua… - ¡Increíble! ¡Le estaba dando instrucciones como si fuera una nena! - ¡Así mamita! ¡Muy bien!
No era una profesional de la mamada…, pero tenía buena voluntad…
-¿Sabés mamita? ¿Viste que cuando te chupo la conchita me tomo el fluido que largás con los orgasmos?
-¡Si! ¡Me gusta sentirte como chupás! ¡Es muy lindo!
-¡Y es muy rico chupártela cuando acabás! ¡Tus juguitos son riquísimos! Te habrás dado cuenta cuando te metía la lengua en la boca después de chuparte… ¡Tenía tu sabor!
-¡Claro! ¡Ese sabor que tenías era mío!
-¡Todo tuyo, mi amor! ¡Riquísimo!
-Quiero hacer todo lo que a vos te gusta. Hasta ahora todo es rico.
-Si claro, pero bueno…, yo tengo ganas de acabar…, tu mamada es muy rica y me calienta mucho y me da ganas de llenarte la boquita…
-¿En mi boca?
-Si claro, si vos querés… solamente así…, no quiero hacer algo que no te guste…
-Es que… no sé si me gusta…, nunca lo hice…
-Podés probar… un poquito. Si no te gusta, no te ...
... doy más. Lo que vos quieras.
Se adecuó inmediatamente. La pija bien ensalivada y su lengua recorriendo el troco desde el glande a los huevos. Cuando la retiraba de la boca, las manos hacían una delicada paja.
-¡Amor! ¡Amorcito! ¡Mamita linda! – Yo usaba todas las flores del lenguaje para que Giuseppina se entusiasmara. En el momento de la arcada, por haber tocado la campañilla, saltaron los goterones de semen. ¡Hasta la garganta llegaron! Casi sin poder respirar no tuvo más remedio que tragar. Cuando la retiró de su boca ya había engalanado su paladar y garganta, con el precioso tributo de mi semen. La voluptuosa Tana me miró con los ojos como monedas…, pero el semen ya estaba recorriendo la faringe. Hiso el clásico movimiento muscular de tragar…
-¡Uuuggg! ¡Casi me ahogo! ¡Es un gusto raro! No es desagradable…, pero tampoco muy grato… Pero…, bueeee…, me lo tragué…
-¡Mamayín! ¡Me hiciste muy feliz! ¡Jajaja! ¡Millones de hijitos están en tu cuerpo! – Nos besamos con toda la pasión del mundo.
Nuestras lenguas se acariciaron durante cinco minutos…, así, con total lujuria, mientras tenía un par de mis dedos en su esfínter…, gozando de su calidez y humedad. Ella no soltaba la poronga.
-¡Amorcito! ¡Qué lindo es “hacer el amor” con vos! - ¡Quiero tenerla contenta! ¡La quiero llevar a mi habitación para pasar toda una noche!
-¡Mi bebé! ¡Qué lindas cosas que me decís!
-¡Me salen desde el alma, mi amor! ¿Estás muy ocupada esta noche?
-No, para nada… ¿por qué?
-Quiero que ...