Naufraga
Fecha: 23/08/2025,
Categorías:
Zoofilia
Tus Relatos
Autor: Berlith, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... él sabía cuál era mi condición porque siempre era muy acomedido de lamerme mi vagina. Creí que quería copular y se lo concedía en las noches. También dando de mi parte. Así que se me hizo crónico los malestares hasta que me di cuenta.
¡El asombro y la autonegación que me invadió!, creo que el tiempo de embarazo de una perra es de 65 días, pero mi caso se pasó. Casi 5 meses. ¿Sera porque la madre es humana?, ¿Cómo será mi hijo?, ¿o hija?, ¿Y qué pensará la gente?, ¿Sería un hibrido?. Esa clase de preguntas me abordaba.
Además, ¿Gente?, ¿Dónde?, aquí no hay nadie, me respondí. Así que, botando un suspiro, que siga el proceso. ¿Acaso podría hacer algo?, ¿Qué opinas lector?. Y no hay nadie con quien conversar y me descargo con Sato mis alegrías, preocupaciones y frustraciones sexuales. Últimamente estoy muy cachonda. Adoro cada vez que estamos abotonados y siento su calidez descargándose dentro de mí. Él sabe que poses y cómo comportarse cuando estamos abotonados por instinto o costumbre por las muchas ocasiones que nos disfrutamos. No hay como un buen amante que te conoce como hacerme llegar al cielo sin dañarte. La de misionero es la mejor para mí. Sentir su pelaje frotar mis pezones y clítoris cuando me penetra me vuelve multiorgásmica. Muchas veces nos quedamos trasero con trasero otras él encima mío de 4 patas o en forma de misionero. La lluvia de orgasmos me embriaga gemir fuerte a la luna como una loba en celo. Hasta opte en nutrirme con su lefa cuando lo mamo. Antes, ...
... no lo hubiera pensado, pero en mi condición, ya saben, necesito proteínas. Algunas veces nado cuando aparecen los malestares en el estanque. Sí que funciona para aliviarme de ellos. Ahora nado tanto en el mar como en el estanque que parezco ser una criatura acuática. En una de esas excursiones acuáticas encontré buceando una langosta de 2 palmas de mi mano de largo. Aun con mi panza acuestas. Lo repito, que rico es nadar desnuda, aun con mi pancita encima. Gracias a Dios por haber comida en esta isla. Pero las pestes son los mosquitos. Hasta que encontré cierta savia de una planta que frotaba por mi cuerpo que los repele la mayor parte del tiempo. No sé cómo no caí enferma hasta ahora. Hasta hoy, solo encontré para sobrevivir aquella fruta que le di de nombre Pinga, por lo largo que es, agua, pescado, langosta, mejillones pegadas en la roca, cocos, plátanos, algas, un tubérculo que no sé qué es pero las aso en la fogata…Dios mándame una olla, ¡please!.
¿Cuándo tendré a mi bebe?. No lo sé. Pensaba en ese momento y decidí acondicionar mi refugio. Menos mal que guarde todo lo sobrante del naufragio que no podía usar. Más adelante si tendré uso para esas cosas. Tengo que fortalecer mi refugio y poner más hojas para aguantar aguaceros…
¡Sorpresa!. Se rompió mi fuente. Reventó justo cuando andaba sembrando tallos del tubérculo en mi huerto. Sato ladro como loco al ver mi expresión de asombro. Mi vagina salía liquido caliente que resbalaba por mis piernas. Sato se puso a oler o ...