El hotel - Relatos Eróticos

El hotel

... noche hacía la habitación de aquel cliente cuando llegué simplemente introduje la tarjeta y abrí la habitación el hombre estaba sentado sobre la cama bien parecido de aspecto agradable vestía un pantalón y una camisa se levantó se presentó dándome dos besos a mí me temblaba todo el cuerpo era más o menos de mi estatura viera afeitado bien arreglado moreno unos buenos dientes y la sonrisa contagiosa el hombre enseguida me comentó que él solía venir habitualmente y que Margari le había dicho que era mi primer hombre aparte de mi marido siendo tan joven él me dijo que podría ser su favorita. 

Yo me sentía muy nerviosa excitada en cierta medida pero sobre todo asustada aquel hombre continuó hablando y yo le contestaba con cierta timidez. 

Él había posado una mano sobre mi pierna en la blonda de las medias y acariciaba aquella zona llegando a mi ingle y desplazando la falda a la vez que miraba mi entrepierna para ver mi ropa interior. 

Recogió mi mano y la puso en su pierna tranquilizándome y diciéndome que iríamos poco a poco y que yo decidiría si quería llegar hasta el final. 

En aquel pantalón se veía el dibujo de su pene y yo llevé mi mano hacia allí al hombre le agradó sentir la presión de mis dedos sobre su falo. 

En aquel momento comprendí que me estaba convirtiendo en una prostituta de lujo un poco más o menos y a pesar de que aquel hombre me había dicho que sería yo la que decidiese al final todo no me atrevía ni siquiera a salir corriendo de aquella ...

... habitación. 

El hombre desabrochó mi blusa y yo fui la que me la quité ya con mi sujetador de encaje en el que solo cubría mi pecho por la parte de abajo mis ubres estaban a su disposición el hombre me dijo que las tenía grandes y que le encantaban acto seguido comenzó a sobarlas y yo terminé recostandome sobre la cama.

Sentí su boca apoderarse de mis pechos succionado mis pezones y pasando su lengua por todas aquella superficie mientras mi sujetador seguía allí como pude mi mano llegó a su cinturón desabrochándolo y luego buscando los botones .

Yo sentía placer me estaba olvidando que estaba casada pero sobre todo en lo que me estaba convirtiendo por momentos. 

Me separé de él estuve a punto de salir corriendo de la habitación cuando mired aquel hombre tendido allí en la cama me imaginé disfrutar con él que sería estar con otro hombre además tenía un aspecto bueno. 

Me puse a horcajadas sobre él y desabroché todos los botones lentamente saqué sus pantalones viendo como aquel slip blanco dibujaba un bonito bulto. 

Me puse de pie y dejé caer aquella minifalda quedándome ahora en medias tanga y aquel sujetador que sujetaba mis pechos desde abajo dejándolos al descubierto. 

El hombre hecho un piropo sobre mi cuerpo mientras yo empecé a sentirme deseada comencé a mordisquear aquel pene sin quitar la prenda sentí como todavía su tamaño crecía algo más a que el hombre jadeaba y yo deseaba sentir más placer. 

Retire la prenda y aquel peligro saltó como un resorte ...