-
La sumisión de Claudia, Cap. 4
Fecha: 05/11/2025, Categorías: Dominación / BDSM Autor: tripleG, Fuente: TodoRelatos
CAPÍTULO CUATRO Claudia condujo lentamente de regreso a su apartamento, tomando carreteras secundarias. Quería tiempo para pensar, mucho tiempo para pensar. Había presionado a Sánchez para obtener más información, pero la pequeña y fornida detective no había sido capaz de proporcionar mucho más. Había sido como arrancarse un diente, dijo, solo para conseguir la poca información que tenía. Ninguna de las personas con las que había hablado quería tratar sobre lo que había sucedido hacía diez años. Homicidio involuntario. Sam había matado a un hombre. No podía imaginárselo haciendo eso... ¿o sí? Cuanto más pensaba en ello, menos segura estaba. Había constancia de que efectivamente lo había hecho, y no importaba si ella podía imaginárselo o no. ¿Cuáles habían sido las circunstancias? Aparentemente, se había declarado que fue en defensa propia y nunca lo habían juzgado por ello. Suponía un cierto alivio, pero aún así... Apagó la radio. Era solo algo ruidoso que la distraía ¿Qué iba a hacer? Su primera idea había sido preguntárselo a Sam directamente. Todavía le parecía ser el mejor modo a pesar de todas las otras ideas que le pasaban por la cabeza. Así que... si era una buena idea, ¿por qué tardaba tanto en llegar a casa? Se dio cuenta de que era porque tenía miedo. No miedo a lo que Sam pudiera hacer. Era miedo de lo que él pudiera decir. También tenía miedo de lo que él no dijera. Era posible que no dijera nada al respecto y eso de alguna manera sería peor que ...
... si simplemente se encogiera de hombros y dijera: "¿Y qué?" Pensándolo bien, después de todo sí que tenía miedo de lo que él pudiera hacer. No tenía miedo de que la lastimara físicamente. Hacían el amor... no, follaban, se corrigió a sí misma... eran salvajes, pervertidos y feroces. Sus azotes picaban y escocían, a veces durante horas después, pero eso era un salvaje juego previo que ambos disfrutaban. A veces la agarraba con tanta fuerza que le dolía, pero ese era un buen dolor. Estaba completamente convencida de que Sam nunca la golpearía de verdad. Pero... ¿y si no decía nada y simplemente se marchaba? Eso le dolería más que si realmente la golpeara. Siguió conduciendo, prestando sólo la atención mínima necesaria para permanecer en su lado de la carretera. Tal vez solo estuviera dándole demasiadas vueltas a las cosas. Lo que realmente necesitaba era un amigo cercano con quien hablar de todo esto. Lástima que la única amiga íntima que tenía era Diane. Diane vivía muy, muy lejos de aquí, y no era el tipo de conversación que podrían tener a través de una línea de larga distancia. Suspiró pesadamente. Podía seguir pensando en ello, preocupándose por ello, y preguntándoselo, pero tarde o temprano tendría que afrontarlo... y a Sam. Por mucho que temiera algunos de los posibles resultados que podía imaginar, incluso cuando era una niña pequeña, no había sido del tipo que se escondía de los hombres del saco. Se enderezó en el asiento. Su pie comenzó a aplicar presión al ...