LNE (3). Unicornios en modo combate - Relatos Eróticos

LNE (3). Unicornios en modo combate

... trascendental. Se llamaba Uxía, pero pedía que la llamaran “Nodo Azul”.

—Aquí conectamos con el alma rumiativa de la Tierra. Por favor, no digáis “vaca” como sinónimo de animal domesticado y explotable. Son nuestras compañeras de pasto.

—¿Y cómo las llamamos? —preguntó Inés, alzando una ceja y torciendo el gesto.

—Guías cíclicas. O hermanas lecheras, si preferís el enfoque lunar. Aunque aquí no estamos a favor de expoliar sus recursos.

Lluvia tomó nota como si le acabaran de revelar el nombre secreto de un planeta, mientras César rodaba los ojos. Cosme, el viejo bedel que inexplicablemente se había apuntado a la excursión “por si hacía falta”, se metió un caramelo de café en la boca y dijo en voz baja:

—Esto antes era una granja de verdad. Ahora les dan masajitos a los cerdos.

***

En el redil de las cabras, una niña llamada Lucía —sospechosamente parecida a una microinfluencer de TikTok— se acercó a un macho cabrío con la intención de hacerse un selfie.

—¡A ver, Pancho! ¡Dame perfil izquierdo! —gritó, mientras levantaba el móvil.

El macho cabrío, que desde luego jamás respondería a un nombre tan prosaico como Pancho, la empitonó levemente en el muslo con la displicencia de quien conoce su lugar en el mundo y no piensa tolerar filtros de belleza.

Lluvia corrió a auxiliar a la niña.

—¿Estás bien, Lucía?

Lucía ya había subido el vídeo. Tenía 2.300 “me gusta” antes de que llegaran al corral de las gallinas.

***

—Estas gallinas ...

... comen quinoa y escuchan música barroca para no estresarse —explicó Uxía (¿Nodo Azul?), mientras señalaba un pequeño altavoz colgado en un árbol del que salía “Las Cuatro Estaciones” de Vivaldi.

—¿Y no será peor eso que la jaula? —dijo Cristina, cruzada de brazos, mortalmente aburrida.

En ese momento, una de las gallinas —de nombre Nostalgia, según su collar identificativo— saltó con violencia sobre la caja de pienso, la volcó y empezó a esparcirlo como si fuera confeti.

—Nostalgia ya ha hecho esto antes —dijo Nodo Azul, con resignación—. Está cuestionando la hegemonía del grano monovarietal.

—¿Podemos pasar al siguiente corral antes de que convoque una asamblea y decidan asaltar el Palacio de Invierno? —preguntó César.

***

Durante el taller de ordeño, por supuesto no invasivo y exclusivamente terapéutico – la leche se utilizaba para alimentar a los animales - César y Marian se ofrecieron a acompañar a los niños al baño. Pero los niños prefirieron mearse un poco encima antes que perderse la inminente exhibición de un ternero con disforia de especie.

Marian, entonces, fingió que buscaba algo en su mochila. César la siguió. Acabaron en una sala anexa, mal ventilada y aún peor iluminada, que parecía haber sido diseñada por alguien que entendía la intimidad como una forma de castigo.

—¿Esto qué demonios será? —preguntó César.

—Creo que es una sala de meditación bovina. Mira —Marian señaló un póster en la pared—: “Ordeña desde el chakra. Leche con ...